Pasó el Mundial de fútbol Brasil 2014, la derrota de Maravilla Martinez y se viene la revancha de Floyd Mayweather con Marcos Maidana. Estos fueron algunos de los temas que hablamos con el gran Walter Nelson charló un rato con nosotros y no solo hablamos de fútbol sino también de boxeo y lo que es ser periodista hoy en día.
Entrevista publicada en la revista Probá Acipesu
-Walter, ya ha pasado un tiempo prudencial de concluido el Mundial de Brasil. ¿Qué evaluación hace usted al respecto?
– Hay dos puntos de vistas. Dos miradas diferentes, la humana y la futbolística. Por primera vez, en los mundiales que vengo cubriendo, se me mezclaron una cantidad de sensaciones diferentes. No solamente deportivas ya que ocurrieron cosas muy dolorosas como fue la muerte de la hija de Titi Fernández. Además de colega, es mi amigo. Nos conocemos desde los catorce años ya que somos del mismo barrio. La otra fue la muerte de mi compañero, el Topo López. Dos accidentes trágicos, fatales que nos dolieron muchísimo y nos van a seguir doliendo durante muchísimo tiempo. A este mundial lo vamos a recordar por estas cosas además de lo futbolístico.
Con respecto a lo estrictamente futbolístico, es una mezcla de tristeza y bronca, más allá de que se llegó muy lejos. Hacía mucho tiempo que no se lograba esto. Desde 1990, que no se llegaba a una final. La sensación amarga y tristeza que nos deja es que se podría haber ganado el título mundial ya que, en el desarrollo del partido, Argentina fue más que Alemania. Se crearon más situaciones de gol pero no se pudieron concretar.
– ¿Cómo vio el nivel del Mundial a nivel juego?
– No fue uno de los mejores mundiales, con decirte que no hubo una figura excluyente al respecto. Tal como fue Maradona en el 86, Pelé en el 58 o el 70, Cruyff en el 74 o Beckenbauer. No hubo una figura excluyente. El goleador del campeonato fue un mediocampista, James Rodriguez que ahora fue vendido al Real Madrid por 108 millones de dólares. Me parece que es un muy buen jugador pero no es una figura brillante como los que te nombré.
-Muchos colegas destacaron la gran cantidad de goles que hubo. La mayor en relación a los últimos mundiales…
– Es cierto, puede ser pero también hay que decir que fue un Mundial muy táctico. A pesar de la gran cantidad de goles que hubo, no hubo equipo que desarrollara un juego en equipo brillante ni una figura individual que haya sobresalido nítidamente. Es verdad que hubo una gran cantidad de goles pero creo que hay que analizarlo desde el punto que hubo una gran cantidad de errores.
-Se dijo –creo-, en una revista alemana que, por ejemplo, Portugal tenía a Cristiano Ronaldo, Holanda a Robben, Brasil a Neymar, Inglaterra a Rooney y Argentina a Messi pero que Alemania tenía un equipo. ¿Era tan asi?
– Fue asi hasta la final, donde la Argentina le hizo un planteo táctico muy inteligente. Esto desnudó que si a Alemania le jugabas de una manera distinta a la que le jugó Brasil, iba a tener inconvenientes.
-¿Messi decepcionó con su juego? Al día de hoy, sigue siendo la gran dicotomía.
– No se si la palabra “decepcionar” es la adecuada. Lo que si pensé es que iba a ser más de lo que fue. Brilló en la primera parte frente a seleccionados de escasísimo nivel como Irán, Bosnia o Nigeria. Quizás no apareció en toda su dimensión, de lo que se espera del mejor jugador del mundo frente a Holanda y Alemania. Decepcionar no, para nada, pero si esperaba más de él. Sobre todo en los partidos finales.
-Siempre se habló del carácter de Messi. ¿Puede ser que ahí este la clave al respecto?
– No. Lo que pasa es que Messi tuvo una adecuación muy distinta a la del argentino. Se crió en Barcelona donde la cultura y la educación son muy diferentes a nuestro país. Estamos hablando de Europa y Sudamérica con una brecha bastante grande. No se crió en Fiorito como Maradona o Fuerte Apache como Tevez donde hay que afrontar las cosas con más temperamento. Se crió en un lugar mucho más tranquilo. Por eso tiene un carácter de esa manera.
-¿Le sorprendió que haya tanta crítica alrededor de Messi? De periodistas que no eran de deportes, que enarbolaron a Messi como un estandarte sin poder criticarlo y otros que lo criticaron muy duramente.
– No, no me sorprende nada. Aquí hay mucha gente que critica sin ningún fundamento. No solamente con Messi sino también con otras cuestiones.
– ¿Cómo vio el rol de los medios, durante el campeonato? Hubo programas que, al principio, atacaron mucho a Sabella y al final lo terminaron alabando.
-Si el equipo juega mal, juega mal y si el equipo juega bien, juega bien. Acá tenes que decir las cosas como son y la realidad era que Argentina no estaba jugando bien en la primera etapa. Más allá de las ráfagas y los momentos de Messi para estar, con sus goles, en los momentos claves y decisivos de cada partido de la primera parte. Después el equipo fue creciendo porque Sabella introdujo un par de cambios que lo beneficiaron mucho, sobre todo en defensa y en el medio campo, con Biglia y Demichelis. Entonces, si juega mal, tenes que decir que juega mal y si juega bien, tenes que decir que juega bien. No pasa por ser panqueques sino por decir la realidad de lo que uno está bien en su momento. El equipo fue de menor a mayor.
-Si le pregunto por el papel de Alejandro Sabella.
– Lo vi bien. Es un tipo muy coherente. Muy tranquilo y fiel a sus convicciones. Me gusta Alejandro Sabella. Quizás dudó o tardó en hacer algunas cosas pero en el momento adecuado las hizo con respecto al equipo. Y respecto al grupo, lo llevó muy bien. No tuvo ningún inconveniente, ningún problema.
-Pasando al boxeo, ¿qué expectativas tiene sobre Maidana-Mayweather II?
– No tengo muchas expectativas sobre el Chino Maidana. Si hace el trámite de pelea, o la táctica de pelea de la pelea anterior, no tiene chance. Va a tener que cambiar en algunos aspectos en la ofensiva. No encimarse tanto. Darle espacio y recorrido a sus golpes ya que el Chino tiene un martillo en cada puño. Por su parte, Mayweather está peleando con uno de los mejores boxeadores de los últimos años. Eso no es poca cosa. Chances siempre hay. El Chino la tiene pero el porcentaje, si uno tiene que decir quien puede ganar, es Mayweather.
– ¿Le sorprendió lo que pasó con Maravilla Martínez?
– No porque lo conozco mucho. Sabía de los problemas de lesiones que tiene. Pero acá hay una cuestión que va más allá de lo boxístico que es el corazón y las ganas. Más allá de que se sepa si se está bien y se puede, en el momento en que se sube al ring, se da cuenta que no se puede. Eso le pasó a Maravilla Martínez al igual que a boxeadores de gran calidad como Muhammad Ali, Sugar Ray Leonard o Mano de Piedra Duran. No por eso se borra todo lo bueno que se hizo anteriormente. Fue doble campeón mundial, siempre peleando en Estados Unidos y ganando.
-Deduzco con que no está de acuerdo con que Maravilla….
– No, no quiero que siga pero es una decisión de él. Tiene casi cuarenta años y muchos problemas físicos y lesiones. A veces el cuerpo dice “basta” y hay que darse cuenta, sobre todo en esta profesión que es tan sacrificada.
– ¿Qué siente cuando aparecen esas críticas despiadadas contra Maravilla Martinez, donde hubo gente que hasta se alegró de su derrota?
– Siento mucha tristeza y un poco de bronca. Hay gente que no entiende nada de esto y de repente sabe de boxeo. Empieza a opinar a partir de la explosión de boxeo que tuvo en los últimos años, sobre todo en la gran pelea que hizo Maravilla contra Julio Cesar Chavez Jr. Hay que tomarlo como de quien viene. En este país, uno ya está acostumbrado a que la gran mayoría se alegra de la desgracia ajena y no con su propio éxito.
-Dos palabras sobre Lucas Matthysse.
– Va a ser campeón del mundo de nuevo, como pasó con el Chino Maidana. Tiene muchas condiciones. Por haber perdido con Danny García –un muy buen campeón que seguramente irá a una categoría superior-, va a tener chances de pelear por el título del mundo. Se habla de una chance con Adrien Broner. Sería fantástico para que vuelva al ruedo con toda la fuerza.
– Más allá de Brian Castaño, ¿cómo ve el futuro del boxeo argentino?
– Brian Castaño es el mejor proyecto del boxeo argentino. Es un clon de Locomotora Castro. Lo digo con fundamento porque lo conozco de su campaña amateur. Mi hijo es el preparador físico de la selección argentina amateur hace como cinco años. Cuando arrancó, me lo marcó y lo fui a ver. Seguí toda su carrera como la de su hermano Alan. Creo que es un proyecto interesantísimo a futuro y que le sobran condiciones. También están Alberto Melián, Yamil Peralta o Leandro Blanc, un mosca que tiene unas condiciones tremendas. Lo veo bien al futuro del boxeo argentino.
-A nivel periodístico, en el caso del fútbol, aparecieron nuevos valores. En el boxeo, cuesta un poco encontrar periodistas jóvenes…
– Si….Está Marcelo González que es joven o Sergio Charitto. Es cierto. Cuesta un poco. Estoy haciendo memoria….Quizás con el resurgimiento de estos últimos años y las apariciones que hubo en el boxeo argentino, del 2009 hasta acá, vayan apareciendo. Tampoco me olvido de Silvana Carsetti, que comenta conmigo o Martín Perazzo. Han aparecido chicos jóvenes pero no tanto como la abundancia que hay en el futbol.
-Walter, ¿por qué periodista?
– Más que nada porque no podía ser jugador de futbol. Siempre me gustó el deporte. Sin darme cuenta me fui metiendo en esto hasta llegar a lo que es hoy. Me gusta mucho la radio. Escuchaba de muy chico la radio. Me crié con grandes profesionales como Fioravanti, Osvaldo Caffarelli, Horacio García Blanco, la Oral Deportiva, Héctor Larrea y Tony Carrizo. Gente de mucha trayectoria y muchísimo nivel. Eso, quizás, me fue empapando de lo que es esto. Me fui metiendo y sin darme cuenta, se convirtió en una de mis grandes pasiones que todavía cultivo y mantengo.
-Si por la puerta de Radio La Red entrase el Walter Nelson que recién empezaba con su carrera periodística, ¿qué le diría?
– “Por qué no me dejaste ser jugador de fútbol!” jajajaja. Le diría que siga su camino y haga lo que más le guste. Le diría que tenga mucho sacrificio. Que se esmere mucho y luche por lo que le gusta. Que sienta pasión por lo que hace. Esta es una profesión que tenes que tener mucha pasión. Sin pasión no se puede hacer mucho. Después está lo otro. El leer y estar permanentemente atento a la información. Hoy las redes sociales y la tecnología han superado a lo que era cuando yo empecé. Las primicias dejaron de ser primicias porque se sabe todo al momento. Hay que tratar de profundizar las informaciones de esas noticias brindando su punto de vista periodístico, en el cual mucha gente estará de acuerdo y otra no tanto.
-Las redes sociales posibilitaron un mayor acceso a la información pero también conspiró contra la formación de los periodistas.
– Si, profundizó un poco la vagancia. Se hace todo mucho más fácil y sin trabajo. Antes era todo más complicado y difícil, a través de una línea telefónica ubicar a alguien o conseguir la información adecuada. Caminar las calles.
-¿Su opinión sobre “Futbol para todos”?
– Me parece bien que haya trabajo para todos, para mucha gente que, quizás, no tenía acceso o posibilidades de trabajar. Que trabaje mucha gente y haya trabajo para mucha gente me parece perfecto. Después está en la gente el elegir que le gusta y que no. Eso ocurrió, ocurre y va a ocurrir siempre. Uno no le puede gustar a todo el mundo. Eso lo tenemos claro. Le podrá gustar otro comentarista u otro relator. Hay para todos los gustos y eso está bien.