Detrás de las paredes….
Dramaturgia: Bolsas En El Viento y Marcos Arano. Con Lautaro Amurri, Lala Buceviciene, Rodrigo Frascara, Marcelo Sapoznik y Fernando Vitale. Músico: Ezequiel Cotton. Vestuario: Alejandra Robotti. Escenografía: Carolina Fernández y Jazmín Savignac. Diseño de luces: Alejandro Velásquez. Música original y dirección musical: Ian Shifres. Asistencia de dirección: Viviana Lastiri y Felipe Martín Saade. Producción ejecutiva: Viviana Lastiri. Coreografía: Paola Sanabria. Dirección: Marcos Arano.
El Excéntrico De La 18º. Lerma 420. Sábado, 20 hs.
El riesgo siempre es bienvenido más aún cuando hay algún tipo de cruce que podría poner un signo de interrogación al respecto. Pero la alegría es aún mayor cuando estos cruces son por demás afortunados, obteniendo un resultado tan rico a nivel artístico como social, si se me permite el término.
Esto es lo que ocurre cuando uno termina de ver “Donde duermen los grillos”, que pone el dedo en la llaga con respecto al funcionamiento del sistema carcelario.
Aquí, el vigilar y castigar foucaultiano es retomado por Mario Arano, que lo cruza con la cruel realidad, en un formato de comedia cercano al clown con un humor no exento de seriedad y con una fuerte crítica a la crueldad de dicho sistema. Pero ojo, a no confundirse. No es una bajada de línea constante sino que se crean situaciones a partir de las vivencias de cuatro presos y la forma de escaparse a ese presente que tienen que vivir. La poética con la que se encara el proyecto no lo pasteuriza sino que, por el contrario, lo dota de una mayor contundencia.
La puesta cuenta con un diseño escenográfico tan ilustrativo como dinámico en su movimiento. Cambian los espacios aunque la cárcel siempre está presente al igual que la opresión, el abuso de poder y la violencia. La utilización de las proyecciones será solo para los momentos que lo requiera, logrando poderosas imágenes creadoras de sentido al tiempo que inquiere sobre las creencias, los prejuicios y las justificaciones para el accionar de quienes deben velar por cumplimiento de las leyes en la sociedad y el castigo para quienes las infrinjan. Al respecto, el público juega un papel importante en la puesta siendo parte de la misma en algunas ocasiones, llegando a construir uno de sus momentos más fuertes y emotivos.
La precisa dirección permite un desarrollo armónico e intenso y con un frenesí bien dosificado, sorprendiendo con el devenir de los hechos, con el transcurrir de los minutos.
En un elenco de calidad, Lala Buceviciene se destaca con su presencia escénica, combinando humor y corrosividad en dosis similares, en personajes claves para el devenir de la puesta. Tampoco olvidamos a “El mudo”, el músico en vivo, quien crea los climas acordes con variados instrumentos. Música surgida de la creatividad del reconocido Ian Shifres.
En “Donde duermen los grillos”, la simultaneidad de variados sentimientos, se entrecruzan para estar sentado en la butaca con emociones mezcladas. Seguramente, después de coronar con aplausos la experiencia vivida, la reflexión seguirá por largo rato. Durante la cena después de terminar la función o más adelante, pero siempre con esa necesidad imperiosa de recomendar lo visto a quien sea el interlocutor de turno.