Sentido homenaje al Tata Cedrón
Con Tata Cedrón. Cuarteto Cedrón: Miguel Praino, Josefina García, Miguel López, Daniel Frascoli. Bailarines: Andrea Manso Hoffman, Aurora Lubiz, Sabrina Castaño, Patricia Herrera, Florencia Garesio, Sabrina Salvatore, Florencia Curatella, Carolina Viturro, Federico Santucho, Marcelo Demarchi, Julián Gutiérrez, Gastón Gatti, Julio Maidán y Claudio Fleischer. Asistencia de Dirección Carina Mele. Asistencia Coreográfica: Sabrina Castaño y Federico Santucho. Vestuario: Andrea Castelli y Abril R. Bonetto. Diseño de Iluminación: Alberto Lemme. Fotografía: Gerardo Azar – Carlos Vizzotto. Video: Gerardo Azar. Diseño: Carlos Vizzotto. Producción Ejecutiva: Florencia Agrazo. Asistencia de Producción: Mauro Ibarra. Dirección: Andrea Castelli.
Teatro El Popular. Chile 2036. Sábado, 20 hs.
Era momento que el Tata Cedrón tuviese un marco teatral que de cuenta de una trayectoria tan importante como la suya. Al respecto, Andrea Castelli concibió una puesta absolutamente deliciosa. A partir de una lectura pormenorizada y sensible de la obra del Tata, Castelli seleccionó 25 temas que reflejan el espíritu y la esencia de Cedrón. Incluso, rescatando temas de otras épocas los cuales se vuelven a escuchar, reverdeciendo los laureles de antaño.
La sapiencia de Castelli en la elección del repertorio musical para conformar el hilo conductor de la puesta, es excelente. La música crea la atmósfera de ese “arrabal” en el que ocurren diversos acontecimientos, siempre atravesados por la marginalidad que destilan las letras. No en vano se abre con “Eche 20 centavos en la ranura”, de Raúl González Tuñón. El mismo poema que da nombre a la puesta, de Celedonio Flores, es absolutamente elocuente con respecto a lo que se verá, al tiempo que uno de los tantos puntos altos. De esta manera, se abordan todas las vicisitudes que implica esa máxima ricotera que dice “vivir solo cuesta vida”. Juan Gelman (“Pasaba algo” y “La balada de los amantes de mi pueblo”), Evaristo Carriego (“Tu secreto”), Homero Manzi (“Palabras sin importancia”) son algunos de los poetas que forman parte de una selección de excelencia.
Otro punto a destacar es la variedad de estilos musicales. Tango y folklore se aúnan con el candombe (tal como es el “Candombe para el que hasta ayer reía” de Luis Alposta –actual co-compositor en la obra de Daniel Melingo) o el vals (“Luz amor”, de su hermana Rosita). El tratamiento musical es atrapante. Va más allá de la sublime interpretación en vivo sino del doblaje que se hace en vivo de la voz del Tata, llegando a lograr que cante a dúo consigo mismo. El cuarteto suena excelente. Aceitado y sentido con un Tata que quiere cantar y disfruta cada canción y cada momento de este arrabal anclado en el corazón de San Cristobal. A esto hay que sumarle que el Popular es un teatro que permite su apreciación desde cualquier lado en que se ubique el espectador en la platea.
La heterogeneidad en la elección de los bailarines asi como el mezclar tango-salón con tango-escenario brindan momentos de fuerte intensidad. Ahí es donde se vuelve a apreciar el ojo clínico en las decisiones y el buen gusto de Castelli, para hacer una gambeta corta a aquello que lo acercaría a cierto “tango for export”. Por el contrario, va hacia el quid de la cuestión, dotándola de una autenticidad y frescura destacable.
“Arrabal salvaje” es un todo de música y teatro que va más allá de una puesta de calidad, para convertirse en un acto de justicia y un reconocimiento a un grande de nuestra música como es el Tata Cedrón.