Himnos, marchas y contramarchas de una nueva gloriosa nación (Teatro)


Canción patria para la posteridad

Dramaturgia y dirección: Martín Seijo. Con Paolo Baseggio, Jose Escobar, Natalia Fernandez Acquier, Ernesto Fontes, Julieta Gibelli, Claudia Mac Auliffe, Daniel Miranda y Sergio Zanardi. Vestuario: Compañía De Funciones Patrióticas. Video: Paolo Baseggio. Música: Paula Banfi, Eduardo Espinoza, Alejandro Millán Pastori, Natalia Olabe y Sebastián Pandolfelli. Letras de canciones: Martín Seijo. Fotografía: Jorge Marino. Diseño gráfico: Paolo Baseggio. Asistencia de dirección: Fernanda Balcells y Guillermo Valdez.

Martes 9 de julio. Fundación PROA. Pedro de Mendoza 1929. A las 17 hs.

La Compañía de Funciones Patrioticas continúa con su cabalgata de trabajos de vida efímera -en tanto sea una fiesta patria-, con un texto que recopila parte de sus trabajo anteriores asi como abre nuevamente la puerta a la concepción de un humor basado en la ironía y el sarcasmo. El público deberá estar con las neuronas a pleno y las antenas arriba para poder captar el bombardeo de imágenes y contenidos que surgirán desde el escenario.

En esta ocasión, tomando como referencia el libro de Esteban Buch, “O juremos con gloria a morir. Historia de una épica de Estado”, la pluma de Martín Seijo hará blanco en la televisión y sus concursos devoradores de materia gris, cruzandolos con el quehacer político en el que se vive hoy en día. La puesta gira en torno a un momento de la Patria (¿el 2013?) en que es menester construir (¿o reconstruir?, ¿quizás crear?) una identidad nacional. Para tal fin, se realiza un concurso para la composición de nuevos himnos patrios. El jurado es un funcionario de dudoso comportamiento, un músico de éxito en el género de la bailanta y una bailarina de limitadas luces. Para esto, nada mejor que un concurso televisivo en el que cualquier relación con la realidad es cierta y fue hecha con tal fin.

Todos los guiños hacia la televisión y su dinámica, se encuentran en una puesta que cuestiona la implementación de una historia “oficial” en detrimento de otra “historia oficial” previamente establecida por el poder de turno y que se asentó con los años. Independientemente de la validez del debate y poner en discusión aquellas ideas arcaicas y anquilosadas a través de los años, la CFP va más allá de esta cuestión y pone el dedo en la llaga en quienes buscan imponer una idea ya sea por medio del “revisionismo” o desean “mantener las buenas costumbres de la historia de nuestra Patria”. Este choque de paradigmas se da en lo que hoy sería, la arena donde se dirimen todas las batallas: la televisión. Allí es donde también suceden los hechos para se cree una situación en la que parece que todo cambia y, en realidad, sigue igual. Construcción de mensajes que serán adoptados por un público que, en su mayoría, no es muy adepto a los grandes cambios a las formas de pensar preestablecidas.

La cuestión identitaria de un país con muchas raíces (o de una raíz que fue podada y reemplazada por otras provenientes del exterior), es una pesadilla que atraviesa a la Argentina desde que es tal. Aquí, los himnos y canciones que se irán presentando son elocuentes en tanto el desarrollo histórico de la Nación, al tiempo que plantean el cambio de paradigmas en tanto el lugar en donde se desea ubicar el pulso del país, más cerca de la población y más alejado de las esferas opresoras del poder dominante.

Uno de los puntos más importantes a destacar es que hay una postura bien definida en la cual el humor es corrosivo y burlón del poder de turno, sea de la ideología que sea. Nadie podría acusar a la CFP de favorecer una idea determinada con sus puestas ya que no es complaciente con ninguna de las partes en pugna. Más aún, en un momento en el que casi no hay –en televisión- una propuesta puramente humorística y en teatro, no hay muchas propuestas en esta tonalidad, como las que hemos mencionado en este blog.

“Himnos, marchas y contramarchas de una nueva gloriosa nación” es una experiencia teatral en todo el sentido de la palabra que vale vivir por primera vez o repetir/recomendar en caso de haber disfrutado de la excelencia del teatro de tiempos efímeros que propone la Compañía de Funciones Patrióticas.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Translate »
Scroll al inicio