“Todo concluye al fin…”, dice una famosa canción pero da pie para el cierre de esta 21° edición –un tanto deshilachada- del BAFICI, de la cual nos explayaremos más adelante. Pero, centrémonos en lo puramente cinematográfico –de momento- respecto al festival. El prestigioso director italiano Nanni Moretti fue el encargado de cerrar el BAFICI con su último documental.
Santiago, Italia
Un refugio frente a la maldad
Allá lejos y hace tiempo (tal como muchos/as desean dejar anclado, sin ponerlo en relación con la actualidad), hubo un gobierno en Chile que rompió con todas las estructuras del establishment. Esa primavera que llevó a cabo la Unión Popular a través de la presidencia de Salvador Allende, entre 1970 y 1973, duró lo que los “autodenominados democráticos” lo permitieron. Pidieron ayuda a Estados Unidos y se derrocó al gobierno elegido en elecciones.
Nanni Moretti realizó un documental excepcional acerca de la ayuda que brindó la embajada italiana a los chilenos que partían hacia el exilio. Al respecto, recopiló un importante material de archivo junto a entrevistas realizadas hace dos años con quienes reconstruyeron su vida en Italia, tras el golpe de Estado encabezado por Augusto Pinochet.
Filmada en Italia y en Chile, el documental es un sentido homenaje, no solo a quienes vivieron la dictadura cívico-militar apoyada por Estados Unidos (detalle que nunca debe olvidarse) sino al legado de Salvador Allende. Los testimonios recabados dan cuenta de la atmósfera de esos días de efervescencia, donde todo parecía ser posible, hasta la llegada de la noche más oscura.
Será en esos testimonios donde se cuela esa dicotomía que atraviesa a esos gobiernos que tienen prioridades que rompen con el statu quo. ¿Se hace de manera repentina o paulatina, tratando de pactar para que el impacto no sea tan fuerte?
Tampoco queda fuera lo que fue vivir con la dictadura ya instalada en el país, Las torturas que sufrieron muchos de los entrevistados y las peripecias para adentrarse en la embajada de Italia, que era una vía de escape frente al mal. La cámara de Moretti enfrenta tanto a un represor al que visita en la cárcel y le tira, frente a la prepotencia del militar por las preguntas que realizaba, que no es “imparcial”, como a las situaciones que se debieron realizar para llegar a la embajada, como saltar la pared, frente a la fuerte vigilancia que había.
Simple en su desarrollo y poderosamente conmovedora, “Santiago, Italia” es de una visión necesaria y obligatoria. No solo en pos de mantener la memoria sino para no olvidar la injerencia de las potencias extranjeras en la vida política de nuestro continente y su influencia absolutamente nefasta. Antes, con golpes militares y ahora, con intervenciones financieras (FMI y deuda externa) aunque Trump se muera de ganas de invadir Venezuela…con la complicidad de los traidores internos.
Título original: Santiago, Italia. Año: 2018. Duración: 80 min. País: Italia. Guión y dirección: Nanni Moretti. Fotografía: Maura Morales Bergmann. Productora: Coproducción Italia-Francia-Chile; Sacher Film Rome / Le Pacte / Storyboard Media / RAI Cinema