El sábado 28 de marzo, se largó el ciclo de recitales que lleva adelante el programa “Rebeldes, soñadores y fugitivos” de Eduardo Fabregat (si queres recordar la nota que le hicimos, hacé click aquí:( http://elcaleidoscopiodelucy.blogspot.com.ar/2013/01/eduardo-fabregat-el-publico-y-el-musico.html).
A las 21.45, sale a escena Mostruo!, un cuarteto de reminiscencias al rock de los setenta pero con un sonido y una estampa acorde a los tiempos que corren. La banda está conformada por Kubilai Medina y Lucas Finocchi en guitarra y voz, Gabriel Ricci en bajo y Luciano Mutinelli en batería y coros, quienes conforman un combo por demás sólido.Se escucha un puñado de muy buenas canciones y melodías en las que la música impera en todo momento ya que casi ni hablan durante el transcurso del concierto. Es menester recordar que Mostruo! va por su cuarto disco en estudio y que, en su momento, el mismísimo Gustavo Cerati los había reconocido como una de las bandas revelación en el 2006. Inclusive, el tema “Dios” formaba parte de la música previa antes que Soda Stereo salga al escenario en sus míticas presentaciones en el estadio Monumental.
En la noche del sábado, Mostruo! hizo honor a su nombre y se comió el escenario. Abren el show con “Profunda desorganización”, canción que titula a su último disco, editado el año pasado. Suena del mismo álbum la excelente “Algo”. También hay lugar para recordar temas de los discos anteriores de la banda como “Tu poder” o “El rey de las bambalinas” asi como el clásico “Ese oso”.
Mostruo! es una banda absolutamente personal, con identidad propia aunque sin renegar de las influencias que, como a toda banda, las atraviesa. De esta manera, hacen un excelente cover de Wilco en español de “Shake it off”, amén de sonidos propios del rock más norteamericano.
El público escucha atento la solidez de una banda con un sonido arrollador. La performance de las dos guitarras entrecruzándose todo el tiempo, ajustadas con un sonido limpio y auténtico, dibujando melodías por encima de una base tan contundente como precisa.
La excelente presentación de Mostruo llega a su fin con la épica “El costado tierno” que también cierra su último disco.
Hubo un breve intermedio a cargo del propio Fabregat, que subió al escenario para amenizar con unos textos alusivos a las particularidades de los músicos en el marco de una banda de acuerdo al instrumento que tocan. Mientras se preparaba la segunda banda, se pudo apreciar algo que terminó siendo una certeza al finalizar la jornada: el buen sonido que hubo para ambos shows.
Con Sr Tomate cambia la atmósfera de la sala. Hay un clima más festivo, con una banda curiosa, que navega en distintos ríos. Sr Tomate está conformada por Natalia Politano en voz y guitarra acústica, Shaman Herrera en guitarras, Hernán Montaño en bajo, Alejandro Bértora en trompeta, teclado, melódica y coros, Pedro Millenaar en armónica y coros y Eduardo Morote en batería y percusión.
Con un público seguidor, de esos que conforman una ceremonia musical junto con la banda que siguen, se larga un show caliente. Seis freaks llenos de música y energía toman por asalto el escenario del Caras y Caretas. Detrás de sus rulos encrespados y su guitarra acústica, Natalia Politano da cuenta que es una frontwoman cautivante. Una cantante con una fuerte presencia escénica y una voz tan particular como personal, lleva adelante canciones con una poética que navega tanto por el delirio como en lo bizarro, logrando que su propuesta sea tan atrapante como indescriptible. La dupla Morote-Montaño construye una base indestructible para que Shaman Herrera juegue con melodías extrañas. Paralelamente, tanto Millenaar en armónica y sobre todo, Bértora en trompeta, meterán algunos arreglos bellísimos que enriquecerán aún más los temas.
Al igual que Mostruo!, Sr Tomate también viene con una buena trayectoria ya que está dándole los últimos toques al que será su sexto disco –sin contar los dos primeros EP que sacaron en el 2004 y 2005-.
Dicen que Sr Tomate es FolkRock-Psicótico. Nosotros diremos que es una coctelera musical que busca retomar, en vivo, esa ceremonia que trasciende la música para tocar una fibra íntima en cada uno de aquellos que bailan y saltan al ritmo de las canciones pergeñadas por este sexteto tan desquiciado como genial.
Termina el show y se siente una sensación muy particular. Es la felicidad de haber presenciado dos excelentes recitales de bandas de calidad como Mostruo y Sr Tomate. El resumen serían una certeza y un deseo próximo. Dos bandas excelentes y las ganas de volver a verlas a la brevedad.