De misterios y bailes
Dramaturgia y dirección: Leonardo Azamor. Con Leonardo Azamor, Agustín Bobillo, Soledad Cagnoni, Paola Fontana y Belén Parrilla. Vestuario: Silvina Biavasqui. Diseño de luces: Rocío Rodríguez Conway. Asistencia de dirección: Estefania Daicz. Co-Dirección: María Soledad Tuchi.
La Tertulia. Gallo 826. Viernes, 23 hs
Todo comienza con una reunión en la cual la anfitriona se siente incomoda frente a la presencia de una mujer que ha concurrido junto con su marido. Lo que empieza siendo un drama de convenciones sociales se va tornando en una sórdida puesta, con una muy buena iluminación que saltará de género en género, con frescura y coherencia. Las historias se superponen de manera ordenada pero sin respetar convenciones de ningún tipo por lo cual habrá incomodidad frente a lo que se ve, para dar paso a la fascinación ante lo desconocido.
Un amor a punto de caerse, una lucha de brujas y música de los 80 se combinan en esta puesta donde la no-organización (que es diferente a la desorganización) de las situaciones permitirán un viaje en el que estará permitido soñar, reflexionar y hasta enojarse cuando una de las protagonistas dice “Este no es el final que yo quiero”. Se volverán a dar las cartas no solo en el final, sino en toda la puesta permitiendo guiños cómplices y hasta cierta sonrisa triste y lacónica frente a los amores con fecha de vencimiento y sin otro remedio que la resignación ante lo inevitable.
Los personajes femeninos son muy fuetes y llevan el hilo de la puesta. Tanto Belén Parrilla y Soledad Cagnoni, desde su antagonismo, se destacan con la personalidad con que dan vida a sus personajes, con una contienda de varitas mágicas y egos rotos para alquilar balcones con la imaginación y creatividad con que se da cuenta de una de las mejores escenas de la puesta.
Leonardo Azamor creó una puesta divertida que combina música, amor y brujería, con imaginación y calidad. Un combo ideal para disfrutar un viernes por la noche.