Minimalismo y pasión
Dramaturgia y dirección: Marianella Morena. Con Cecilia Cósero. Sonido: Maia Mónaco. Arte: Claudia Sánchez. Producción: Gabriela Fernández Gavilán y Sergio Miranda.
ElKafka Teatro. Lambaré 860. Domingo, 21 hs
Una mujer sola ocupa el centro del escenario. Labios rojos y vestido blanco, enmarcan, junto con las luces, lo que será la pasión de la gran actríz Trinidad Guevara encarnada en la exactamente visceral Cecilia Cósero. Y es pasión porque no se limita a la descripción lisa y llana de su biografía –que no lo hace del todo- sino a sus vivencias y sentimientos. Estos iban desde el amor, el odio, la soledad, la desdicha y la lucha por los derechos de la mujer allá por el siglo XVIII. De más está decir que esto era casi imposible pero ella vivió como quiso y fue revolucionaria a su manera. Guste a quien guste y al que no, que mire para otro lado. El texto es potente y logra, a través del minimalismo de su puesta, la contundencia propia de lo realizado artesanalmente, con mínimos medios. La vida de Trinidad Guevara es tomada como una montaña rusa de pasión y deseo en los que la velocidad y los vaivenes de su legado atrapan pero no abruman en una obra exacta como un metrónomo.
Cecilia Cósero apela a una actuación física y de apariencia fría –pero que no lo es en lo más mínimo-, debido a que el tono de voz sube y baja al tiempo que hará percusión con su propio cuerpo. Con la luz haciendo un plano americano, el cuerpo de Cósero se divide en lo visto y lo que se mueve, creando una actuación fuerte y sensible al mismo tiempo que una sensación dicotómica con los matices adecuados de lo que se está presenciando. Todo este combo hará absolutamente disfrutables los casi cuarenta y cinco minutos que dura la obra.
Marianella Morena creó con “Trinidad Guevara” el homenaje perfecto y visceral para una actriz que, antes que nada (y que todo) fue una mujer revolucionaria, con todo lo que esto implica.
Yo la vi en Montevideo en Sala Verdi, excelente actuación de la actriz, excelente
texto, insuperable monólogo y una iluminación sorprendente.