Bafici 2017, IX: Los años 80 (y 90) en el rock argentino

La sección de música siempre fue importante dentro del BAFICI. Suele traer diversas “joyitas” que terminan siendo de culto para todos aquellos que las pudieron ver y quienes se quedaron con las ganas. En este caso, son dos documentales referidos al rock argentino de los años 80 y 90. El primero está referido a ese lugar mítico y emblemático llamado Cemento mientras que el segundo gira en torno al retorno de Los Violadores con su recital en el denominado Luna Punk. 

Cemento –El documental- 

Guión: Lisandro Carcavallo, Franco Medina. Dirección: Lisandro Carcavallo. Con Indio Solari, Ricardo Mollo, Ricardio Iorio, Mario Pergolini y más. Dirección de Fotografía: Leandro Chirico. Sonido: Mariano Mazzitelli. Edición: Leandro Sánchez. Productor: Decime Puente, Understyle. Dirección de Arte: Lisandro Carcavallo. País: Argentina. Año: 2017. Idioma: Español. Formato: DCP. Color. 100 minutos



Hacía falta llevar a cabo un documental que de cuenta de lo que fue el sitio más importante del rock a finales de los 80, los años 90 y entrado el nuevo siglo, tal como fue Cemento.


Para el estreno, se realizó la proyección en el lugar donde se encontraba ubicado originalmente la discoteca, en Estados Unidos 1234, sitio en el que hoy funciona un estacionamiento (una vergüenza). Tal como en antaño, se hizo cola para ingresar pero ahora era diferente.

Fue rara la sensación de volver a entrar en Cemento. Ver lo que no es en la actualidad y recordar lo que fue en su momento, es un shock difícil de describir.
Javier Porta Fouz, director del BAFICI, abrió la proyección con unas palabras tan profundas como una pileta vacía. Intentó hacer un chiste en relación con el frío y Cemento pero no hay nada peor que intentar caer gracioso cuando no se conoce el paño. La indiferencia fue palpable hasta que Lisandro Carcavallo habló de lo que realmente importaba, en un breve y elocuente discurso. Después, fue el turno de Mariano Asch que se encargó de leer un texto que escribió, tocando la sensibilidad de los presentes. Para el final, se leyó una carta escrita por Raúl Villarreal -cercanísimo colaborador de Omar Chaban- en Marcos Paz, donde cumple su condena por Cromañon. Los aplausos fueron instantáneos y sentidos. En esta línea, podemos decir que la figura de Omar Chabán fue la más recordada y reivindicada en esos momentos.

Se apagaron las luces y se dio inicio al documental que retoma las voces de gran cantidad de quienes transitaron por Cemento. Katja Alemann fue quien abrió la ronda de testimonios, al tiempo que la pantalla devolvía lo que acontecía allá por el año 1985. Imágenes de como se construía Cemento, con sus happenings y movidas culturales. Patria chica de la Organización Negra y demás expresiones que terminaron siendo fundamentales en la cultura de aquellos años. Es menester recordar que, en sus comienzos, Cemento no era un reducto rockero. De hecho, a Chaban el rock no le gustaba pero decidió abrir sus búsquedas hacia estos lares.
De esta forma, el viaje mágico y misterioso en lo que fue Cemento va pasando por imágenes de músicos (Indio Solari, Ricardo Mollo, Pil, Ciro Pertusi, Mosca, etc), periodistas (Mario Pergolini, Juan Di Natale, el Ruso Verea, Ezequiel Abalos) y poetas (Fernando Noy) que reconstruyen la historia de la mítica discoteca a través de sus palabras.

El público daba su veredicto con respecto a los testimonios a través de la espontaneidad de los aplausos o la reprobación. En este último caso, se dio con Gustavo Cordera que fue chiflado asi como se escuchó algún grito en su contra, tras sus declaraciones referidas a las mujeres. En cambio, hubo aplausos para Ricardo Iorio, Alejandro Sokol, Felix Gutierrez (Todos Tus Muertos) y Geniol, entre otros.

El documental ilustra el paso de los años. La heterogeneidad del público dará cuenta de su recepción. Algunos dirán que los 80 pasaron demasiado rápido o que los 90 podrían haber tenido un poco más de desarrollo, pero cuando se encaran proyectos de esta envergadura, siempre habrá algún agujero. Igualmente, eso no importa ya que lo realmente valedero es la realización de semejante obra para reivindicar de una vez por todas a Cemento, no solo como “semillero del rock” –tal como titulo Nicolás Igarzabal su excelente libro al respecto-, sino como un espacio fundamental para la cultura de la ciudad.

Disfrutable de principio a fín, “Cemento, el documental” es tanto una reivindicación como un homenaje a un sitio histórico para la ciudad de Buenos Aires que trasciende al rock.

De más está decir que es un absoluto despropósito y una vergüenza el manejo del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires con nuestra historia. Transformar a Cemento en un estacionamiento, da cuenta del deseo de borrar de manera premeditada todo aquello que pasó en las míticas paredes de Estados Unidos 1234. De borrar, directamente, la cultura, algo que es inaudito e imperdonable

Los Violadores en el Luna Punk 

Guión y dirección: Juan Riggirozzi. Con Los Violadores y Juan Carlos Kreimer. Sonido: Juan Pablo Ferraro. Dirección de Fotografía: Julian Carrara. Edición: Juan Riggirozzi y Mariano Tozzini. Productor: Filmódromo. Dirección de Arte: Nancy López. País: Argentina. Año: 2017. Idioma: Español. Formato: DCP. Color y B&N. 76 minutos.


El 24 de abril de 2016 se producía un hecho que iba más allá de la novedad. No solo era la vuelta de Los Violadores a los escenarios después de 27 años de ausencia, con la formación original, sino que se arriesgaban a llevar su propuesta al mítico Luna Park.

Quienes fuimos testigos de este recital, nos fuimos con la gran alegría de ver a la banda rockeando como en otras épocas. Se apreciaba ese deseo por volver y parecía que la coyuntura estaba a tono a este regreso.

Tras la realización de “Ellos son….los Violadores”, primer documental sobre la banda, Juan Riggirozzi filmó todos los pormenores de esta vuelta, charlando con cada uno de ellos sobre lo que iba a ser este show en el –ahora denominado- Luna Punk. Pero para todo esto, utilizó la figura del cronista que escribe en su máquina de escribir los acontecimientos. Para tal fin, será Juan Carlos Kreimer, pluma fundamental no solo del movimiento sino del periodismo cultural –escribió “Punk, la muerte joven”-, quien describa el devenir de los hechos que tendrán como punto final el concierto de retorno.
La cámara de Riggirozzi se metió en los reportajes que brindaron en ese momento asi como en los ensayos. En este punto, el fundido entre el ensayo y el tema en cuestión tocado en vivo brinda otro punto a descubrir tanto para el fan como aquél que está pendiente del hecho musical en sí.

Con sus diferencias a cuestas –que las tienen- pero sin que esto, al día de hoy, sea foco de conflicto, Los Violadores tienen su propio documental en el que no solo da cuenta de un regreso más que auspicioso sino que permitió a más de una generación que no los pudo ver, disfrutar quienes son los pioneros del punk rock en el continente.

Al día de hoy, Los Violadores han retomado la senda de las presentaciones tras lo que fue este Luna Punk, con shows en Lima y en Buenos Aires. Latinoamérica espera poder disfrutar de esta vuelta y verlos en vivo. Pero con ellos nunca se sabe. Mientras tanto, “Los Violadores en el Luna Punk” es un muy buen paliativo para combatir la ansiedad y disfrutar lo que fue este mítico concierto de retorno. 

Domingo 30 de abril. Espacio Cultural Julián Centeya. A las 16 hs.  





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