Desierto y Agua presenta “Sábado”, su nuevo video

La cuarentena no detiene la creatividad de Desierto y Agua. El dúo de electro-folk compuesto por Daniel Riaño y Andrea Feiguin presenta su nuevo tema “Sábado” con toques tecno, letra alusiva a la situación y un video con muñecos Lego. ¡Pero tienen mucho para contar en la siguiente entrevista….!

-La primera y obvia pregunta es cómo surge “Sábado”…

Andrea Feiguin: Fue mientras ensayábamos, justamente un día sábado que era muy parecido a los días anteriores. Sentimos en ese momento que daba igual que día fuera, por eso la necesidad de remarcar, cantando que era “sábado” no era un día más…. Así salió el estribillo. Nos entusiasmamos mucho, tal como suele pasarnos con la música y no paramos hasta sacar este tema pegadizo.
-¿Cómo surgió la idea de los muñecos Lego? ¿Dónde filmaron el video?
Dany Riaño: Fue resultado de las condiciones técnicas que teníamos a disposición. Esto quiere decir que primero hicimos un video donde la iluminación no había sido muy buena y el fondo blanco que teníamos no era un infinito. Por lo tanto, nuestros pies no se veian bien. De repente dijimos «Che, si achicamos el espacio para filmar y usamos miniaturas?» Las luces que teníamos recontra iban a servir porque, al reducir las proporciones, se duplicaba su potencia. El fondo lo resolvimos con una cartulina blanca y ahí logramos el efecto INFINITO que es clave para que se vea profesional el video. Con nuestros cuerpos resolvimos filmar de la cintura para arriba y listo. En base a eso, armamos el guion.
– ¿Cómo los está tratando la cuarentena?
AF:Como somos pareja y tenemos el estudio en casa con todas las máquinas, instrumentos y equipos nos pegó tremendamente creativos. No hay momento de bajón. Creamos, componemos, ensayamos, tocamos por streaming, maquinamos y soñamos el futuro tratando de ponerle la mejor energía. Además, apoyamos a quienes están con bajas vibraciones para que puedan sentirse mejor.
– En el caso de ustedes, ¿están componiendo más? ¿Trabajan más en el estudio de grabación?
DR: Ahora trabajamos mas en la compu con el programa Ableton. Antes ensayábamos mucho porque tocábamos muy seguido en vivo. Eso hacia que las horas de trabajo se dediquen al perfeccionamiento del «Live Show». Con la cuarentena y el cese de los recitales, nos enfocamos a la composición y la inmediata grabación de nuevos tracks para publicarlos de manera urgente en las plataformas digitales. Este nuevo factor cambio nuestra creatividad ya que apareció la necesidad inminente de hablar sobre este momento histórico que estamos atravesando. Por lo tanto, el estilo musical lo liberamos al 100% y dejamos que fluya a lo autentico, a lo que aparece como resultado de este nuevo y extraño presente. Un ejemplo de esto es el track anterior que lanzamos llamado «Pandemia style».
– ¿Deben elegir entre más músicas o letras? ¿Tienen más temas compuestos, no?
AF: A veces surgen primero letras y les ponemos sonoridad. Pero generalmente son bases que arma Dany, o ideas que surgen a alguno de los dos sobre un tipo de sonidos o estilos. Desde ahí, comenzamos a crear y hacerlas crecer. Personalmente primero me surgen más letras en general, aunque últimamente también sonidos. Dany es netamente musicalidad, ES música.
-¿Tienen pensado sacar un disco o prefieren la forma en que se maneja ahora de cortar “temas” sueltos?
DR: En principio estamos manejando los dos planes a la vez. Ahora estamos sacando estos singles con tematicas bien pandemicas que son bastantes anarquicos. La verdad es que no nos estamos  preocupando que sigan una linea musical pero si literaria. 
AF: Tenemos todo un álbum hecho, que seguimos trabajando con Hernán Bruckner, nuestro productor artístico y mastering. Una vez terminado que, calculamos será en un par de meses, comenzará el proceso de comunicación y movimiento. Este disco va del downtempo al techno y tech house, siempre con una impronta andina. Sería una continuidad de “Elementos”, que lanzamos en marzo de este año.
DRA fin de año publicaremos el disco nuevo que menciono Andrea.
– Venían haciendo una muy interesante fusión de música andina y el folklore con electrónica. ¿Cómo se dio este cambio de estilo?
DR:Es una reacción, una expresión como resultado de la bomba covidica. Sentimos que todo se esta moviendo muy rápido y no hay que aferrarse a nada. Estamos disfrutando de entregarnos a las nuevas corrientes y reinventarnos en ellas. Te aseguro que el resultado nos va sorprendiendo de la mejor manera.
AF:Podríamos decir que “Sábado” es un lapsus natural, orgánico. Como contamos antes fluyó del mismo estado y del ensayo. Sabemos que, si bien está dentro de la electrónica, no cuenta con los sonidos andinos que veníamos desarrollando. Dudamos por este tema en qué destino darle pero decidimos lanzarlo como single. A pesar de eso, es realmente auténtico. Es lo que estamos vibrando hoy, y si no encaja en el esquema que veníamos desarrollando no importa. Así somos nosotros. Esto somos.

-En sus conciertos solían pasar imágenes además del recital propiamente dicho. ¿Cómo es la recepción del público? Más que nada porque hay quienes consideran que un show es solo de música.

DR: Me gustan los recitales que me ofrecen mucho, sobre todo si es música electrónica. Por lo tanto con mi proyecto quiero ofrecer eso, que sea un todo. Que la gente escuche, vea, flashee, que haya muchos estimulos. Creo que la culpa la tiene Pink Floyd. Siempre me gusto mucho como encaraban sus vivos, También Massive Atack me abrió la cabeza en como llevar a cabo esta comunicación audiovisual. En nuestros conciertos siempre se acercaba alguno a decir que la re flasheaba con nuestras mascara, ropas, videos, música etc. Asi que ¡¡joya!!
– ¿Qué opinan del protocolo que salió para que los músicos puedan presentarse?
AF:El nuevo protocolo donde además de habilitar la actividad en salas de ensayo, estudios de grabación y espacios para realización de streamings –siempre sin público presente- se pueden dar clases nos parece fantástica, muchos colegas (la mayoría) no están en nuestra ventajosa posición y no estaban pudiendo hacer absolutamente nada!
DR:Tengo entendio que es un kilombo sacar ese permiso ya que te piden que tambien seas socio de Capiff entre otras cosas y la mayoria de los laburantes no estan en Capiff. Creo que esta apuntado a bandas consagradas esto, por lo tanto, parece ser que es bastante elitista.
– Tengo entendido que han dado conciertos por las redes sociales. ¿Cómo es esa experiencia en tanto público y ustedes como músicos?
DR:Al principio estábamos re manija e hicimos bastantes shows que estuvieron muy intensos porque había una gran interacción con la gente que se conectaba. Luego empezó a mermar esa cuestion  y ahí paramos todo. Ahora hacemos shows en Streaming si es dentro de un formato ajeno a nosotros. Por ejemplo, algún festival o evento donde podamos trabajar en conjunto con mas gente. También estamos viendo de poner el ojo en que haya una retribución monetaria mas concisa en estos shows.
– Tras la edición de, allá lejos y hace tiempo, “La quimera del caracol” y la disolución de la primera formación de Desierto y Agua, ¿pensabas estar haciendo la fusión tecno-folk-andina y ahora retomar el pop con sintetizadores?
DR:Hubo una señal durante ese proceso que me lo hizo pensar. Había ido a la calle Talcahuano a comprar una guitarra eléctrica. Hasta ese entonces solo tenía una criolla lógicamente microfoneada. El repertorio de ese disco necesitaba mucha distorsión. La cuestión es que, mirando guitarras, me topé con un sintetizador que era un MiniKorg. Ví que tenía «vocoder» y de pronto, recordé mi pasado cuando tenia un dúo de música electrónica llamado Proix, allí por el año 2001. Me dije «Si en esa época, hubiera tenido esta maquina, me volvía loco» a lo cual me pregunté «¿y si me lo compro ahora y fusiono el rock con la electrónica? Pero eso quedo ahí, solo en mi cabeza…¡y nunca se fue!
– Andrea, en tu caso, ¿te imaginaste alguna vez estar compartiendo un dúo de música y haciendo giras, más allá de tu actividad profesional?
AF:Ahora siento que era lo que debía pasar. Antes de que este viaje musical comience no lo imaginaba así. Es mucho mejor de lo que jamás soñé. Aprendo mucho todos los días. Me esfuerzo, ensayo, estudio. Me ejercito para superarme y llegar cada vez a un mejor nivel. Es un sueño sin dormir, que me hace totalmente feliz y plena.

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