Fabula pasteurizada
Dramaturgia y dirección: Andrés Binetti. Con Malala González, Alejandro Lifschitz, Mariano Saba y Pablo Sciolini. Escenografía: Martín Escape. Asistencia de dirección: Ezequiel Lozano.
Abasto Social Club. Humahuaca 3649. Sábado, 23 hs.
Una pareja gay se va de campamento a Basavilbaso. Las desavenencias entre ellos se ven acrecentadas con la aparición de una joven guitarrista y un guía paraguayo del lugar. La historia es simpática y tiene sus momentos de quiebre –tragedia incluída- en una historia con la que logra una empatía generalizada pero que, más de eso, no transmite. O sea, como divertimento, para pasar un rato agradable, logra su cometido.
Si eventualmente, había alguna otra intención para desarrollar, no se logra. Esto es una lástima ya que contar con una actriz como Malala González para que haga un par de temas en guitarra, parece poco. La puesta es agradable pero cae en un halo de corrección y previsibilidad extrema. Parte del público se reirá y otra aguardará porque algo ocurra. Todo cierra y es prolijo. Nada está fuera de su lugar. Probablemente sea esto lo que para algunos sea un mérito y para otros, sabe a muy poco teniendo en cuenta el material dramatúrgico y actoral a disposición.