La puesta parte de una conferencia realizada para desentrañar las causas de la conducta de Poroto. Con la utilización de un video para ilustrar la situación y diversas escenas oníricas, se obtiene un ritmo acorde al deseo de ilustrar al tiempo que se mofa de esta misma “ilustración”. O sea, construye un sentido el cual se irá redescubriendo todo el tiempo.
El espacio (y el mismo Poroto –caracterizado con acierto por todos los actores-) va mutando de forma de acuerdo a lo necesitado para la escena sin que se afecte a la puesta. Por su construcción y desarrollo, la puesta no tendrá medias tintas en la aceptación del público. A algunos les parecerá interesante y atrapante mientras que a otros les parecerá aburrida y monótona.
La ironía del texto y el humor absurdo así como la inteligente forma de presentar el “desorden” de Poroto por no “amoldarse a la sociedad” dan forma a “Dirección Contraria” una muy buena interpretación de “Poroto”, la novela de Eduardo “Tato” Pavlovsky.