Poesía en puro estado teatral
Con Federico Costa, Josefina Lamarre, Juan Gabarra y Fernando Cerra. Baguala de las letras: Liliana Bodoc. Asistencia bagual: Agustina Iparraguirre. Bagual de dirección y puesta escénica: Galileo Bodoc
Teatro Hasta Trilce, Maza 177. Sábados, 22.15hs.
Una experiencia completa, que combina teatro, música y poesía. Desde el mismo ingreso a uno de los espacios que conforman Hasta Trilce, se puede presenciar un recital de poesía o canciones para después adentrarnos en la puesta propiamente dicha.
Un cuento, una leyenda. Traición y devoción para la palabra.
El genial campeón mundial de ajedrez Mikhail Tal solía decir que “Si prohibiesen el ajedrez, probablemente me haría contrabandista”. Algo similar sostiene el protagonista de la obra. El manejo del lenguaje y su uso, da cuenta de la sutileza de un texto atrapante que girará sobre la relación de un poeta y una mujer que se debate entre traicionarlo o no con respecto al uso que hace sobre la poesía.
A través de los actos que forman parte de la puesta, se desarrolla un encuentro con la poesía y la forma en que puede conmover pero sin caer en sensiblerías ni sentimentalismos de poca monta. Por el contrario, hay una reivindicación de la poesía y la figura del poeta que se presenta como tal, haciendo gala de su valentía y la convicción de su pensar y sentir. Poesía revolucionaria, que toma la voz en un contexto de sordidez y chatura, para encarnar esa otra posibilidad que siempre hay de adoptar frente a designios malvados. Instrumento de la libertad tan deseada pero a la vez tan temidapor la implicancia de toma de decisiones a nivel personal como colectivo.
La puesta cuenta con una escenografía tan exacta como ilustrativa. Permite el cambio de espacios con naturalidad pero sin perder el ritmo de la puesta. La música también se hace presente como parte activa de la puesta y será interpretada por los propios actores a través de sus respectivos personajes. Las actuaciones son exactas y sentidas mientras construyen un todo de poesía al cual contribuirá el público presente. El final será tan misterioso como subyugante en tanto atravesará las fronteras de prejuicios propios frente a lo visto en el escenario.
“Memorias de una alcahueta” es un viaje de sensibilidad poética como herramienta de cambio y transformación. Dejarse llevar por bellos textos es la premisa fundamental para disfrutar de una puesta tierna y atrapante.