Más allá de los cuarenta años
Adaptación y Traducción: Maria Antonieta Eyras. Con Arnaldo André y Marta González. Productor asociado: Martin Garcia y Georgina Rey. Producción general: Los Cinco Pasos y Cabrera Insfran. Supervisión: Rodolfo Bebán. Dirección: Arnaldo André.
Teatro Regina. Av. Santa Fe 1235. Jueves a sábado, 21 hs; domingos, 20 hs.
Pareciera ser que el amor –asi como sus dimes y diretes- forman parte de una edad temprana o hasta los cuarenta años y un poco más. En el caso que nos compete, se corre la edad en la que comienza –y no termina- la historia, en unos diez años. En ese marco, se presentan Mariano y Roberta, un matrimonio con un buen pasar pero con una crisis en su horizonte más cercano.
Con un formato de comedia que va desde la risa a la emoción, la puesta recorre las crisis de identidad y de búsqueda que comienzan a aparecer a medida que pasa el tiempo. La condición de “hombre” a través de la virilidad y el carisma en el caso de Mariano o la necesidad de “mantenerse” joven y atractiva, en Roberta, son puntos sobre los cuales girará una puesta de cuatro actos. La forma en que se les presenta el amor y su estrecha relación con una negación respecto al paso del tiempo. Todo esto, fomentado por una sociedad que exige imposibles frente al devenir de los años.
El texto es dinámico. La dirección sobria e inteligente de Arnaldo André permite que los personajes envejezcan sin resignarse a la lucha. No se dejan estar y tienen sus propios universos. Allí es donde radica la riqueza de la obra, Roberta y Mariano hablan y desnudan sus miserias y añoranzas, en relación con sus hijos, amores y sus propias individualidades. Son plenamente conscientes al respecto, con una buena dosis de realidad. Igualmente, cae, con el paso de los años de los personajes, en algunos lugares comunes para lograr situaciones más graciosas o con mayor simpatía. No es necesario exacerbar algún defecto para lograr un manto de ternura hacia el personaje.
Con actuaciones acordes a lo requerido por el texto, “Intimidad indecente” es una puesta efectiva y ágil, al tiempo que llama a la reflexión tanto por la inteligencia de su texto como por la certeza que la vida no se acaba a los cincuenta años sino que puede ser larga e interesante de vivir.