JOKER. No todo es delirio…. ¿O si?

Una vez aquietada la fiebre suscitada por la película «Joker», podemos analizar varios aspectos que nos brindó la misma con un poco más de distancia en el tiempo. En este caso, el actor y director de teatro Martín Ortíz, analiza la composición del personaje que lleva adelante Joaquin Phoenix y su relación con la sociedad que nos rodea. 

Texto: Martín Ortíz


Grotowski hace una diferenciación fundamental y maravillosa entre Mueca y Gesto. La Mueca es un movimiento externo, una forma superficial de una imagen en el rostro. El Gesto tiene otro origen. Viene desde lo profundo, desde adentro del actor o la actriz. Es el resultado de esa construcción detallada de todos los niveles que sustentan la acción. El Gesto nos revela la profundidad del personaje. La Mueca es apenas una cáscara.
En el Teatro vemos mucha mueca, incluso en los cuerpos que sólo quieren ilustrar. En cine también y ahí, el primer plano, la cercanía del ojo del espectador, desnuda la mala actuación escondida en esa contorsión del rostro.
Cuando el Gesto se hace presente es cuando la Gran Actuación aparece. El momento en que el espectador llega a percibir todo lo que le sucede al personaje sin necesidad de las palabras.

Habría que realizar la experiencia de ver muteada buena parte de JOKER, película dirigida por Todd Phillips, para poder percibir y entender toda la tragedia de ese personaje detrás del origen profundo de los gestos de la composición de Joaquin Phoenix. Cualquiera que descubra recién ahora que Phoenix es un actor tremendo nunca vió, al menos, «Gladiator» de Ridley Scott, en donde compone un Emperador Romano insuperable.

El relato de JOKER es abierto a muchas interpretaciones:

        Una posibilidad es que la película nos haga ser parte de los delirios de un paciente psiquiátrico.
       Otra es que, al igual que a Arthur Fleck -nombre «real» de quien se convertirá en Joker-, el delirio y la realidad se nos vayan mezclando y no podamos discernir entre uno y otro.
        Una tercera lectura -que incluye a la segunda-, es la de una crítica al Sistema y de cómo el desprecio de la Sociedad -que es parte de ese Sistema-, construye la propia violencia en su contra.

Es verdad que el vínculo que establece una obra de arte siempre es entre la propia obra y un sujeto. Será absolutamente personal, aunque seamos cientos en la platea. Después cada uno hará su lectura particular y esa película podrá tener innumerables planos o ser, simplemente, la historia de un chico malo. Son tres lecturas válidas (aunque no las únicas) pero con variedad de profundidad. Ninguna de ellas sería posible sin un extraordinario trabajo en todos los planos del film.

Personalmente, me ubico en la Tercera Opción porque, a mi modo de ver y sentir, quedarnos en la primera teniendo a disposición las otras dos, es quedarse en la superficie.
Vivimos en un Sistema que discrimina y excluye. Muchos de los miembros del mismo, realizan estas operaciones, quizá como mecanismo para no ser parte de aquellos que quedan afuera. 
Arthur Fleck, un diferente, un loco, es víctima de ambos. Es tratado como inferior en su trabajo al tiempo que es agredido por los pobres (los niños que lo roban en la calle). El Estado le corta el tratamiento psiquiátrico y los ricos (los clase media que lo agreden en el Metro de NY) son los que lo golpean en patota. Esa sucesión de exclusiones, violencia y discriminación deriva en su estallido de violencia que, aunque algunos no lo tomen así, es un acto de defensa personal.
La Sociedad discriminada, excluida y agredida por el Sistema encuentra en ese asesino anónimo, un símbolo y un líder. El héroe de un levantamiento contra el opresor.
Ese paciente psiquiátrico, inestable en sus delirios, se transforma en la cara visible de un levantamiento, una protesta furiosa y generalizada contra un Sistema que ya no es tolerable. Cuando las brasas están calientes, cualquier brisa las sacude y enciende, no tanto por su capacidad y poder sino por sus propias condiciones, dispuestas a convertirse en llama, en fuego.
En el mundo de JOKER es posible, también, que todo eso sea parte de las visiones de Arthur encerrado en un psiquiátrico y que, en el final, su aparente fuga sea el primer paso para hacer realidad sus delirios.
En todo caso, la historia sirve también para mostrar el mundo de mierda en que vivimos aunque esté ambientada en un pasado no tan lejano.

0 comentarios en “JOKER. No todo es delirio…. ¿O si?”

  1. El personaje Arthur Fleck, en niguna de las tres hipótesis vive una "tragedia" como sugiere el autor de esta nota. Por el contrario el personaje de este show mediático, vive un drama. En todo caso, tomando la perspectiva de la peli de hollywood, lo que vive es un melodrama.

  2. Estimado Alan
    Tu comentario me hizo ir a leer mis reflexiones nuevamente y, luego de releerlas, a responderte. No es mi intención responder cada comentario que se haga a mi nota porque este no es tema que necesite acuerdos, consensos ni encontrar verdades. Pero como te centrás en la cuestión del Género Artístico, algo de lo que en ningún momento habla mi nota, se presta a generar confusiones que parecen atacar a mi capacidad de discernirlos.
    En ninguno de los párrafos se habla del Género (Tragedia, Melodrama, Drama) y la única vez que uso la palabra “tragedia” está más que claro que no es en ese sentido. La uso para señalar (un uso bastante cotidiano) lo que la magistral actuación de Phoenix deja ver del mundo interior de Fleck.
    LOVE STORY dirigida por Arthur Hiller en 1970 es un clarísimo ejemplo de melodrama. En medio de un amor idílico y apasionado surge el evento que lo convierte en melodrama: la inesperada enfermedad terminal de Jenny (Ali MacGraw). La “tragedia” personal de Jenny es su enfermedad terminal y eso se da en una obra que es un melodrama. Son formas de hablar, de decir, que no apelan a definiciones de género.
    Ninguna de las tres Hipótesis que propongo tiene que ver ni están asociadas ni parten del uso que hago de la palabra “tragedia” ni se centran en la cuestión del Género artístico. Como digo, explícitamente, son tres posibles interpretaciones y agrego que, seguramente, hay más y todas válidas. Cosas que pasan con el arte.
    Para terminar, una pregunta: ¿Cuál es el “show mediático” en el que vive este personaje?
    Saludo afectuoso!!

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