Músico y actor de amplia trayectoria, su rostro se hizo conocido en esta orilla del Río de la Plata a través de los memorables ciclos de “Telecataplum” e “Hiperhumor”. Este sábado, Julio Frade celebra sus cincuenta y cinco años con la música y le cuenta a ECDL sus impresiones de ese momento.
– Julio, ¿cómo va a ser su show del próximo sábado. ¿Va a retomar su último disco «Tangodestado»? ¿Será más jazzero?
– Voy a hacer todos los estilos desde folklore al Tango desatado, jazz, bossa, mientras cuento estos cincuenta y cinco años de mi historia profesional. Me presento solo al piano.
– Barbra Streisand se definía como “la actriz que canta”. En su caso, ¿sería “el músico que actúa” o “el actor que hace música”?
– Justamente, Barbra Streisand es mi cantante preferida. Creo que es ambas cosas. En realidad, soy un músico que empezó a actuar y que pude aprender con los mejores a mi lado. Tuvimos en Telecataplum grandes directores como David Stivel que nos enseñó mucho. Además, tuve la suerte de alternar con grandes músicos desde muy chico.
– ¿Usted cree que, al día de hoy, el tango es más reconocido como danza que como música?
– Eso pasa mucho en Europa y en USA, pero en Latinoamérica gusta más la letra y música de los tangos.
– ¿Considera al día de hoy que el tango y el jazz son más «exigentes» que otras músicas populares?
– Absolutamente. Eso pasa porque el tango y el jazz son músicas urbanas. Ambas, muy elaboradas en armonía y melodía, con la belleza y la complejidad de la música culta.
– En tanto que el tango y el jazz están ligadas más a lo afectivo y lo emocional, ¿no hay una tendencia a suplir ese «sentimiento» por un «virtuosismo», a veces desmedido?
– El virtuosismo desmedido siempre es malo en todo tipo de música. El arte pasa a ser una acrobacia y eso no es bueno. Troilo era grande usando pocas notas y mucho sentimiento. La improvisación igual es muy buena porque muestra el sentimiento del intérprete en forma espontánea.
– Usted que tocó con Piazzolla, ¿por qué cree que todavía hay gente que lo discute? ¿Es por su persona o por su música?
– La gente que discute a Piazzolla es extremista y cerrada. La música debe estar por encima de los fanatismos y debe evolucionar al compás del mundo para demostrar su importancia y trascendencia. El sonido de las ciudades ha cambiado a través de estos años, así que la música también debe cambiar.
– ¿Cómo recuerda la época de «Telecataplum» y de «Hiperhumor»?
– Telecataplum fué el programa de humor más importante de su época y una verdadera revolución cultural. Hiperhumor fué un ciclo más popular con más rating y más público pero nuestro humor siempre fue de calidad, sin vulgaridades ni mal gusto ni chabacanería. En eso nuestro grupo fue muy cuidadoso.-
– ¿Cómo ve usted al humor que se hace por la televisión? ¿Por qué cree que hay pocos programas de humor?
– El humor actual es mucho menos cuidado y menos pensado. Hay pocos programas de humor porque para hacer el verdadero humor hay que trabajar mucho todos los días para producir nuevas ideas.
– ¿Hay algún tipo de límites para el humor?
-El límite lo pone el buen gusto de sus creadores.
– Si Julio Frade no era músico o actor, ¿qué hubiese sido?
– Hubiese sido músico primero, y después actor.
Sábado 6 de julio. Julio Frade cumple 55 años con la música. Mala Vida Club. México 311. A las 21 hs.