Antes que nada, pedimos disculpas a los lectores de El Caleidoscopio por el atraso en las entregas. Quien esto escribe realiza el sincericidio -que, espero, sepan disculpar- de decirles que nos hemos visto abrumados por la cantidad de pelis que se vieron y la falta de tiempo para sentarnos a realizar el análisis correspondiente.
Hecho este anuncio, aquí vamos con tres peli para disfrutar mañana domingo, al tiempo que esperamos, el resultado de las competencias del Festival
About July
Violencia de verano
Título de Exhibición: About July. Título Original: Qiyue tian. Título en Inglés: About July. Guión y dirección: Wei Te-Sheng. País: Taiwán. Año: 1999. Formato Digibeta. Color. Duración: 72′. Con: Wang En-Yong, Si-Ma San-San. Fotografía: Chin Ting-Chang, Liu San-Lang. Edición: Chen Bo-Wen. Producción: Lim Min-Uan. Compañía Productora: Rice Film International
La sección dedicada al director taiwanes Wei Te-Sheng tuvo la gran idea de programar su primera película, “About July”. Aquí, Wei retrata una historia sencilla, filmada en 16 mm pero con muchos matices para descubrir a través del humor y del drama, sabiamente dosificado en partes iguales. Chengjia es un niño de catorce años al que le caen las responsabilidades por la cabeza ante la muerte de su padre, que no puede hacerse cargo de las deudas que tiene con la mafia por su adicción al juego. El niño no solo tiene que empezar a trabajar para quienes indujeron a su padre a arrojarse frente a un camión sino que también cuenta con el estigma de ser considerado una persona de “mala suerte”. El conocido y nunca bien ponderado “mufa” para decirlo en criollo.
La historia gira en torno a como Chengjia va cambiando su vida a partir de su trabajo como “campana” de un casino clandestino, el cual lo aleja cada vez más de sus afectos. Esa metamorfosis se ve de manera explicita en situaciones graciosas de como quiere aprender a fumar o se hace el duro frente al espejo, al estilo del Travis Brickle de Robert De Niro en Taxi Driver con una subyugante inocencia.
La forma en que Wei refleja esa adolescencia inquieta, en la que se busca mostrar lo que no es, confundida y más cuando las responsabilidades y situaciones sobrepasan su edad, pero sin caer en excesos que caen en el golpe bajo de la moralina o el mensaje pedagógico. Por tal motivo, su admiración hacia un gangster un poco mayor que él pero con poder, mujeres y maldad, permite que la identificación sea inmediata. Más aún si este lo desprecia, sabiendo de la admiración que le tiene Chengjia.
Las metáforas con las que cuenta el film son sencillas, de fácil entendimiento y contundente lectura, tal como el ver como sus compañeros siguen yendo a la escuela o la imposibilidad de enterrar a su padre mientras el cajón sigue en su casa.
Con una cámara que filma y se mete en distintos lugares, el aura artesanal de la peli le brinda un marco de realismo en el que todo está en su lugar. Incluso, la aparición de la policía en todos los aspectos que le son conocidos. Justamente, esa es una de las partes más fuertes de la película en la que nadie puede hacerse el distraído ante las actividades de los encargados de hacer cumplir la ley.
Con un final potente, de esos que dejan sorprendido al espectador y pide más, el primer film de Wei Te-Sheng es una de esas gratas sorpresas que reaparecen sin hacer ruido. Realizada hace trece años, al día de hoy, mantiene esa frescura en la que los hechos siguen siendo –lamentablemente- actuales y con un toque especial (y personal) que atraviesa los años.
Domingo 22 de abril. Malba Cine. A las 16.45 hs.
Salsipuedes
El árbol que muestra el bosque
Título de Exhibición: Salsipuedes. Título Original: Salsipuedes. Dirección y guión: Mariano Luque. País: Argentina. Año: 2012. Formato HD. Color. Duración: 66′. Con Mara Santucho, Marcelo Arbach, Mariana Briski y Camila Murias. Fotografía: Natalia König y José Benassi. Edición: Mariano Luque. Producción: Julia Rotondi
Primera escena, una mujer triste sentada en un coche del lado del acompañante. Planos que duran un tiempo interesante pero en el que las palabras no son lo que abundan. Una escena muestra desde lo visual lo ocurrido y a lo sumo, se agrega alguna sutileza. De tal forma, el panorama va a ir decantándose desde la certeza que Carmen y Rafael son un matrimonio que se va de camping para pasarla juntos hacia una situación por la cual muchas mujeres tienen la desdicha de pasar. Con muchos silencios y planos abiertos de pocas acciones, se va creando sentido a través de lo que se sugiere, se esboza, con lo cual la contundencia es superior respecto a si se hubiese caído en una linealidad respecto a las intenciones y a lo ocurrido.
Otro punto a destacar es que casi toda la película gira en torno a Carmen y sus afectos. Como su propia familia la “ayuda” con su situación, acompañándola pero sin tomar ninguna medida efectiva. Un “tenés que comprenderlo” al tiempo que se “maquilla” –literalmente- la situación dan cuenta de un circulo vicioso en el que todos pierden y nadie gana. Porque la violencia no solo se expresa a través de golpes sino por medio de situaciones de silencio, resignación y sumisión. Esa carpa en la que quieren pasar un buen momento no es más que la cárcel en la que se encuentra Carmen, durmiendo con el enemigo pero sin saber como seguir con su vida. Allí es donde también se aprecia la relación de poder en la pareja, quien lleva adelante todo a pesar de la nocividad de dicha dirección.
La forma en que se creó a los personajes es fuerte debido a que Rafael no es un tipo que caiga mal, sino que puede ser como cualquiera de nosotros, haciendo más fuerte el contenido de la película. No es un tipo que está desbordado o es un exaltado sino un tipo “común” como tantos que pululan por ahí y uno puede compartir un colectivo, un trabajo o un partido de futbol.
Sin ánimo de denuncia, la película aborda un tema tabú en el que, al día de hoy, es preferible no hablar de eso y esconder cualquier tipo de suciedad, bajo la alfombra de las “buenas costumbres” para no incomodar a nadie.
Mariano Luque plantea con sabiduría y sutileza una situación de violencia en la cual se aprecia los permenores de una relación de la cual son todos conscientes de lo ocurrido pero que nadie puede resolver de manera sana.
Domingo 22 de abril. Hoyts 6. A las 18.45 hs.
Papirosen
Lo primero es la familia
Título de Exhibición: Papirosen. Título Original: Papirosen. Dirección: Gastón Solnicki. País: Argentina. Año 2011. Formato HD. Color. Duración: 74′. Con Víctor Solnicki, Mirta Najdorf, Mateo Tarlowsky, Pola Winicki y Sebastián Tarlowsky. Fotografía: Gastón Solnicki. Edición: Andrea Kleinman. Producción: Gastón Solnicki y Pablo Chernov. Compañía Productora: Filmy Wiktora.
Pola habla con acento polaco. Es inmigrante y es la abuela de Gastón Solnicki, realizador de “Papirosen”, una película que retoma viejas filmaciones familiares con la que se construye un relato cinematográfico. El nombre, tomado de una canción polaca, da cuenta del lugar de nacimiento de Pola, quien abre la película a partir de la descripción de su vida. Gastón filmó durante muchos años distintos acontecimientos de su familia en los que la tristeza y la alegría se mezclaban en partes iguales. De tal manera, ese relato es ameno en tanto que se pierde que los “personajes” no están actuando sino que están viviendo lo que se está viendo. Hay alegrías para mostrar asi como algunos momentos aciagos, sin contar aquellos que tiene toda familia donde lo patético, lo cómico y lo triste se mezclan en situaciones indescriptibles…para quien las vive. Entre los momentos emotivos, se destaca cuando Pola recuerda su Polonia natal durante la Segunda Guerra Mundial o el viaje de Victor –papá de Gastón- para encontrarse con sus recuerdos en Europa.
La forma en que Solnicki retrató a su familia es de buen gusto y deja una buena película para ver y entretenerse. No mucho más que eso ya que, si bien no es un regodeo de su retrato familiar, puede ocurrir que el interés decaiga en algún momento. Es inevitable caer en la aseveración “otra vez filmando un seder de Pesaj” (momento de la cena de la Pascua judía) por parte de alguien de “la cole” siendo, quien esto escribe, ¡también de la cole! Esos lugares comunes ocupan espacio y tiempo, sin brindar mayor enriquecimiento a lo que sería “la película”.
Los personajes, que sería la familia Solnicki, son entrañables y simpáticos, con una buena cantidad de momentos para destacar, sobre todo en los que aparece (y habla) Pola, la abuela.
Entrañable y amena, “Papirosen” es una película simpática que te deja con un buen gusto después de verla. Tan simple como eso, y sin mayor ambiciòn al respecto.
Domingo 22 de abril. Teatro 25 de mayo. A las 16.15 hs.
De las reseñadas solo vi Papirosen y coincido con vos en que es una linda pelicula sin mayores ambiciones pero que funcionan y sin lugar a dudas la abuela es el personaje importantisimo como esa madre judia,llena de brillos y peinado marcado tan tipica
BUen post ,te sigo !