«Rita»: A la maestra con cariño


La quinta temporada de «Rita», estrenada hace poco en Netflix, es la excusa ideal para escribir (y recomendar) una serie que, silenciosamente, fue logrando prestigio y, como las buenas obras de teatro, se recomienda “boca a boca”. Creada originalmente por Christian Torpe para TV2 de la Televisión de Dinamarca, retoma la historia de Rita Madsen, una maestra por demás particular en su modo de enseñar y en su vida cotidiana. Esta vuelta se produce tras tres años de silencio respecto de la cuarta temporada. Pero antes de abordar esta quinta temporada, recomendamos fervientemente ver las anteriores.

La riqueza de los textos y del personaje en cuestión va más allá, llegado el caso, de la escuela. Una educadora de la vida que enseña con el cuchillo entre los dientes a alumnos a los que brinda sus conocimientos. Lejos (por suerte) de ejemplos pasteurizados como Jacinta Pichimahuida, Rita es una mujer de armas tomar e ir al frente, no sólo por su deseo sino su historia personal, atravesada por una personalidad que tiene sus propias reglas para vivir frente a una sociedad que no ve con buenos ojos muchas de sus ideas.
Justamente, uno de los puntos fuertes de Rita es el lugar donde se ubica como “educadora” porque revisita todo este concepto. Inclusive, la forma en que se define: “Soy maestra para proteger a los niños de sus padres”. Toda una definición que apunta a que el futuro es de quienes, al día de hoy, reciben una enseñanza “formal” por parte de los maestros y la educación, en sus casas. El problema surge cuando la educación choca no solo con la enseñanza sino con varias reglas sociales. Todo esto, dicho desde una sociedad como la danesa, donde todo “funciona como debe”, gran sueño de la clase media urbana de nuestro país –no, no voy a caer en la tentación de hacer mención a Porteñolandia- que se ufana de saberes y una conciencia que no tienen (¿le interesará tener?) y pregona aquello que no respeta «puertas adentro»
Estas reflexiones surgen desde el momento que se tocan temas como la homosexualidad, el racismo, el aborto, el bullying, las fake news y el tan mentado “respeto” que –tanto en Argentina como Dinamarca- es utilizado como pantalla para encubrir hipocresía y falsedad.

Rita se escuda en la fortaleza de quien lleva como máxima el axioma de “la mejor defensa es el ataque”. Sus armas son varias: inteligencia, conocimientos en la materia, belleza, carisma y temperamento. No obstante, su gran deuda (¿o virtud?) es esa franqueza que rompe toda barrera y desarticula cualquier tipo de atadura, con todo lo que esto implica. Llámese “jerarquía laboral”, “reglas de convivencia”, «Dios» o directamente, “familia” y “pareja”. Su vida personal es la que plantea interrogantes para todo aquél que postula ser “abierto” pero….hasta ahí.


Irreverente y políticamente incorrecta, cada decisión que toma el personaje excelentemente interpretado por Mille Dinesen es como un efecto dominó que pone a su contexto a bailar a su propio ritmo. Con un consumo de tabaco comparable al de Keith Richards, es la que, a partir de su “poco apego a las formas”, termina cambiando los mundos de sus seres queridos pero, ¿podrá cambiar el suyo?.
La familia y la forma de establecer los lazos visibilizan la paradoja en que ubica la sociedad del siglo XXI al individuo. Por un lado, la exigencia en pos del éxito y el reconocimiento mientras que el pedido de ser uno mismo hace lo suyo. Esa especie de sábana corta que termina siendo una frustración permanente siempre y cuando…..¡la aceptes como tal! Retomando lo que decía John Lennon en su tema “Watching the wheels”, Rita se la pasa diciendo que “no hay problemas, solo hay soluciones” mientras “la gente está confundida haciendo preguntas”.

Cada capítulo no dura más de cuarenta minutos. Es en este punto donde se aprecia la forma en que se debate sobre un importante número de temas con problemáticas en las que, algunas transcurren en el tiempo y otras, finalizan en el mencionado capítulo. Las comparaciones son odiosas pero no podemos dejar de recordar que, en ficciones de nuestro país, se gira a lo largo de un mismo tema a lo largo de varios episodios como si fuera un chicle. Si no me creen, vean las últimas tiras argentinas y el manejo de diversos temas candentes. 

El elenco es de calidad con sus diversos matices. Con precisión quirúrgica en su composición, Mille Dinesen da vida a una Rita tan adorable como contestataria. Dota a ésta, de los múltiples interrogantes que debe afrontar aquella persona que sabe lo que quiere. Una toma de posición que va a contramano de una mayoría que, de acuerdo a la sociedad que corresponda, ¿la respeta y acepta? El ponerse en un lugar de reflexión constante frente sus propias decisiones. Inclusive, si esto amerita viajar al pasado y ver cómo y cuando surge esa personalidad. Se destacan Carsten Bjørnlund (Rasmus, director de escuela con el que Rita tiene tantos desencuentros como puntos en común) y Lise Baastrup (Hjørdis, una profesora que es la contraparte exacta de Rita) que son pilares en establecer esos momentos de reflexión, al poner el dedo en la llaga en las relaciones personales. Por su parte, el vínculo con sus hijos -en especial, con Jeppe- y su ex marido, abren el abanico a otras posibilidades para situaciones que son bien conocidas. 
Serán todos estos planteos los que piden respeto por aprehender aquello que es -seguramente- diferente a nuestra coyuntura y crianza. A partir de ahí, al establecer el diálogo entre lo visto y lo que tiene uno, es donde se verá la riqueza de las propuestas de la serie así como la capacidad de los espectadores para reflexionar al respecto (o hacerse el/la otaria/o frente a lo visto y parapetarse en ideas que atrasan años, algo muy común en la sociedad argentina)
En estas crónicas, dejamos el trailer de todo lo que recomendamos. Lamentablemente, dieron de baja aquél fragmento en idioma original y subtitulado y dejaron éste, que es bastante elocuente e ilustrativo. No obstante, la serie no está traducida.  

Mujer empoderada, heroína que hace de la fuerza un escudo para cubrir sus propias debilidades, “Rita” es de esas series que te dejan pensando, con ganas de debatir al respecto.    

Ficha técnica.

Título original: Rita. Idea: Christian Torpe. Con Mille Dinesen, Lise Baastrup, Nikolaj Groth, Carsten Bjørnlund, Tommy Kenter, Ole Dupont, Lykke Sand Michelsen, Carsten Norgaard, Morten Vang Simonsen, Ellen Hillingsø, Sara Hjort Ditlevsen, Lotte Andersen, Elena Arndt-Jensen, Laura Bach, Kasper Leisner, Alexandre Willaume, Marijana Jankovic y Lisbet Lundquist. Dirección: Christian Torpe, Lars Kaalund, Jannik Johansen, Kathrine Windfeld. Guion: Christian Torpe, Marie Osterbye, Mette Heeno, Stefan Jaworski y Thomas Levin. Música: Kristian Leth, Fridolin T.S. Nordso. Fotografía: Kim Hogh y Rasmus Heise. Año: 2012-2020. Duración de los capítulos: 40 min. País: Dinamarca. Productora: SF Studios. Género: Serie de TV. Comedia. Drama.


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