La semana pasada, les contamos que se iba a realizar la presentación de este libro. Ahora, les traemos una reseña del mismo porque nos resultó una forma de abordar el Holocausto pero desde otra vertiente. Al respecto, Eterna Cadencia Editora publicó hace poco “La música en el Holocausto”, un libro de excelente factura, escrito por la investigadora y profesora Shirli Gilbert. Con este libro, Gilbert abrió una nueva forma de ver lo que fue el horror de la maquinaria nazi. No obstante, no se queda en la redención de las víctimas –bienvenida sea esta visión- sino que su investigación es absolutamente concienzuda y exhaustiva en lo que a datos y conductas se refiere. Por ejemplo, menciona la distinción que implicaba el status social dentro del campo y como se hacía extensible a las orquestas y en su trato. También manifiesta sus dudas sobre la previsibilidad de un discurso redentor.
A lo largo del libro, el análisis de Gilbert va ubicándose como medio de lectura indispensable en la consideración de la actividad musical como un intento consciente para impedir la desmoralización o como un modo de resistencia espiritual ante el destino que les esperaba a los prisioneros. Al respecto, la autora hace una mención digna de considerar a lo largo de la lectura del libro. Es importante detenerse en el análisis de la influencia de la música en los prisioneros. La manipulación que hicieron los nazis de la música para “convencer” a los recién llegados de los trenes de las bondades del lugar o como, dentro de los prisioneros, el pertenecer a la orquesta, permitía algunas situaciones ventajosas en detrimento de otros similares pero carentes de virtudes…musicales.