Osvaldo Bayer: «No hay democracia si hay chicos con hambre»

Teníamos ganas de saber su opinión de un momento nacional e internacional por demás interesante y candente para debatir. Llamamos a Osvaldo Bayer para concretar la nota y sin medir mayores inconvenientes, se pactó rápidamente. Historiador, escritor y periodista, Bayer es una fuente de consulta imprescindible y coherente sobre la actualidad argentina. Así, sin vueltas ni rodeos, con la misma coherencia y prestancia que su marca de conducta, Bayer dejó sus impresiones sobre varios temas candentes a nivel nacional e internacional. 

– Osvaldo ¿Cómo ve, en retrospectiva el cambio anti-Cristina por el tema del campo y ahora que está reflotando tanto su imagen como la de Néstor Kirchner?
– La oposición exageró en todo. En vez de, digamos adecuarse a la democracia, defender las instituciones, se ha desatado completamente con que “todo está mal” y eso, a la gente la ha molestado. Más aún con la cantidad de candidatos que tienen para asumir el poder. Además, algunas cosas del Gobierno están resultando positivas como el juzgamiento y condena de los criminales de la Dictadura. Ninguna democracia anterior lo había hecho y hay que reconocerlo. La Ley de Medios es necesaria para toda democracia tenerla aprobada en ese marco y no en el de la Dictadura. Además hay ciertas cosas que han sido bastante positivas como ciertas ventajas para los niños y jubilados. Para defender la democracia, que tanta mala suerte tuvo en nuestro país –tuvimos catorce dictaduras militares-, debemos proteger las instituciones y criticar lo que vemos mal, de forma constructiva. No puede ser que el 3.5 % de nuestros niños estén bajo el nivel de desnutrición. Se mejoró un poco pero no puede ser esto. Por otra parte, mientras haya villas miseria, no se puede hablar de democracia. Toda familia debe tener un techo digno y mientras haya gente sin trabajo, tampoco hay una verdadera democracia. Son pautas que debemos cumplir y si es necesario salir a la calle a reclamar esto, en forma pacífica.
– Usted habla de salir a la calle pero hace dos años las cacerolas sonaron por el tema del campo, justo en el día de un nuevo aniversario del golpe del 76, ¿tanto es el egoísmo de la clase media argentina?
– Si y lo ha demostrado con su apoyo a las dictaduras militares. No es casualidad y fue una constante. La gran parte de esa clase media saludó a la Dictadura y se calló la boca con la desaparición de personas, sin salir a la calle. ¿Cuántos años estuvieron solas las Madres de Plaza de Mayo, caminando y buscando, sin ayuda de nadie? Fui a ver esas reuniones que hicieron en el Monumento a los españoles y vi gente (muchos jóvenes) muy bien vestida, que estaban defendiendo los intereses de la Sociedad Rural.
– ¿Lo reconocieron?
– No, para nada. Me conocen en los barrios más obreros pero no allí y aunque me hubieran reconocido, hubiese ido igual.
– ¿Y qué impresión se llevó?
– Que el país había cambiado muy poco.
– ¿Tenemos una juventud que se está derechizando?
– En todas las sociedades actuales, la juventud muestra más violencia que otras generaciones. Para mi proviene de la televisión y todo lo que sea la pantalla (juegos, filmes). Tanto aquí como en Europa, vi chicos pegados a la pantalla mirando peleas entre hombres, que se destrozan entre ellos y los padres no dicen nada. Vivimos en una sociedad muy brutal y esto es típico del sistema capitalista.

– Me llama la atención que, ahora los jóvenes no solo que no estudian sino que tienen un terrible racismo. Aquí se la pasa criticando a los peruanos y a los bolivianos pero después se va a España y sufre que le digan “sudaca”.
 – Ahí se da cuenta y lo sufre.
– Pero ¿realmente cambia de mente este tipo?
– Según. Los que realmente tienen conciencia hacen una especie de filosofía al respecto. Se pregunta, al menos, ¿Por qué los países más ricos atraen a las juventudes de los países más pobres? Esto trae un racismo basado en la competencia con los recién llegados, que tienen la culpa de todo y no el sistema, que los expulsó de sus lugares de origen porque no les daban las oportunidades o tenían una terrible dictadura.
– Hay un refrán que dice “Mas vale conocido que bueno por conocer”. ¿Tan poco afectos al cambio somos los argentinos?
– Siempre hay que buscar gente nueva. Más vale buscar gente nueva antes que otros ya conocidos, por más exitosos que estos hayan sido. Hay que darles chance a todos y que nadie se sienta imprescindible. Siempre fui enemigo de los personalismos, de la re-elección. Se gobiernan cuatro años y después se va pero si gobierna el marido o la mujer y después vuelve el otro y así sucesivamente, sería una especie de monarquía. Nunca más de cuatro años porque después la gente se empieza a sentir imprescindible. A creerse que es necesaria y deja su gente para que siga ese camino.
– ¿Ese es el error de Chávez?
– Si pero son situaciones diferentes y difíciles, al igual que la de Fidel Castro y su hermano, con el bloque económico y militar más grande de la historia y ellos, apenas una islita.
– Igual siempre a Cuba se la critica por los derechos humanos…
– Al respecto, le recomendaría a los que critican a Cuba que vayan a visitar dos islas del Caribe: primero Santo Domingo y después Cuba y van a ver la diferencia. Cuba ha sufrido mucho con ese tremendo sitio de casi 61 años. Ojo, no me gusta que mueran presos que hacen ayuno pero también critiquemos las penas de muerte en silla eléctrica, que hace la denominada justicia norteamericana. Fue la misma justicia que asesinó a los “Mártires de Chicago” por pedir las ocho horas de trabajo y “ajustició” a Sacco y Vanzetti, con la silla eléctrica. Cien años después, pidieron disculpas por los mártires de Chicago, porque estuvieron mal juzgados, lo mismo que con Sacco y Vanzetti, cuarenta años más tarde. Un poquito tarde se acordaron los muchachos….
– Si le pregunto por Mauricio Macri….
– Primero, Mauricio Macri no tiene ningún antecedente en la función pública. No hay ningún escrito suyo con búsqueda de soluciones para la sociedad. Nunca intervino en política. Su único antecedente fue la presidencia en Boca Juniors y ser hijo de un empresario. Lo vemos con sus resoluciones, anulando la Biblioteca de Mayo porque dijo que era izquierdista. No es así pero son los consejos que recibe ya que él nunca ha leído nada. Además, Macri dice que la culpa de todo la tienen los trapitos y los lava-coche cuando es la sociedad la responsable. Denles trabajo, abran escuelas de oficio y van a ver como se acaba todo esto. Siempre ocurrió que la culpa no la tiene la sociedad sino el extranjero. Recordemos el fascismo italiano y el nazismo alemán con la culpa de los judíos; aquí la culpa la tiene el cabecita negra, los paraguas, los perucas. Mirá, en 1904, Buenos Aires elige al primer diputado socialista de Latinoamerica, Alfredo Palacios. Ciento tres años después, elige a Macri. Lo mismo se puede decir de Italia, con pensadores como Gramsci, que vota a Berlusconi, un empresario al que le gusta fotografiarse con chicas bien y hacer chistes verdes. Francia lo mismo con esa revolución de grandes ilusiones, en 1789 y ahora con ese monigote de Sarkozy, que lo único que hace es admirar la belleza de su esposa.
– Cuando usted ve los titulares de los diarios referidos a la Iglesia y los abusos sexuales, ¿qué reflexión le merece?
– Esto es lo irracional que tiene la Iglesia católica: la exigencia de castidad a sus sacerdotes y el poner el cuerpo de la mujer y el amor como pecado. Ya Lutero en 1520, terminó con la castidad. Los pastores se casan, tienen hijos porque es algo natural pero a esta Iglesia le falta raciocinio, con cada vez menos fieles. ¿Por qué los cardenales y obispos italianos apoyaron a un obispo alemán para ser Papa? Alemania es quien les da más dinero al Vaticano ya que cuando alguien va a un trabajo, le preguntan a qué religión pertenece. Si dice a la protestante, el 2% del sueldo va a la iglesia protestante, si dice católico, también. Tiene que dar el 2% por una ley. Si uno dice que no pertenece a ninguna iglesia, no da nada y la Iglesia católica estaba perdiendo mucha gente. Los cardenales italianos decidieron elegir un Papa alemán del cual los alemanes se enorgullezcan, se queden en la Iglesia y seguían aportando dinero. Esto no pasó porque el Papa comete muchos errores y la situación no trajo más gente a las iglesias. Además, la Iglesia no ha avanzado. Antes nadie decía nada con el tema de la homosexualidad y la pedofilia de los sacerdotes y si había una denuncia, la policía no hacía nada. Ahora, la gente denuncia estas cosas y se ve la verdad de la Iglesia católica.
– Le faltaría dar un paso adelante por su papel en la Dictadura.
– Nunca hizo una autocrítica con respecto a su comportamiento. Salvo un par de obispos y sacerdotes que fueron asesinados, su conducta dejó mucho que desear. También pasó lo mismo con la Iglesia católica y protestante en la Alemania nazi. Aceptaron todo salvo algunos obispos y curas. El Papa de aquella época aceptó el fascismo, en la propia Roma.
-¿Cuáles son sus expectativas para el Bicentenario?
– Cuando uno lee los documentos de los héroes de mayo, es increíble. Debemos leerlos y aprender de un Belgrano, de un Moreno o de un Esteban Echeverría que aquí, cuando se despanzurraba a los federales contra los unitarios, escribía el “dogma socialista” en 1837, donde decía que “jamás habrá democracia sino hay igualdad. La verdadera democracia se consigue solamente con la igualdad”. En 1813 se aprobó el himno que dice “Ved en trono, a la noble igualdad, libertad, libertad, libertad”. Tenemos que llegar a la igualdad en libertad. Acabar de una vez con nuestra terrible experiencia, con lo que en Europa llaman la “muerte argentina” que consistía en la desaparición de personas. Uno de los métodos más crueles en toda la historia de la humanidad.
– ¿Ve algún cambio a futuro?
– Yo no me hago ninguna ilusión. Lo único que digo es que hay que salir a la calle y luchar. Por una sociedad igualitaria, que no haya niños con hambre, ni villas miseria y donde todos tengan trabajo. Por eso, tenemos que luchar. No se cómo vamos a ir pero no solo con nuestros representantes. Tenemos que empujarlos con ideales y que estos se cumplan.

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