De valores puertas adentro
De Jorge Garcia Alonso. Con Lionel Arostegui, Verónica Cosse, Estela Garelli, Anita Gutierrez y Alfredo Zenobi. Diseño de vestuario y de escenografía: Magdalena Banach. Reposición de vestuario y de escenografía: María Isabel Gual. Diseño de luces: Leandra Rodríguez. Diseño gráfico: Lucas Bianchini. Asistencia de iluminación: Susana Zilbervarg. Asistencia de dirección: Gabriela Blanco. Dirección: Villanueva Cosse.
Teatro del Pueblo. Av Roque Sáenz Peña 943. Sábado, 20 hs.
Otra familia surca los teatros de Buenos Aires. En este caso, retoma con una mezcla justa de humor y sordidez la crianza que puede haber puertas adentro del núcleo familiar.
En este caso, una familia se apresta a salir a festejar un cumpleaños cuando irrumpe un extraño que estará destinado a romper con la rutina del padre Antonio, la madre Clotide, la hija Micaela y la abuela María Esther (madre del padre). La relación entre ellos es la que se basa en el remanido mandato familiar y patriarcal, con un padre que atrasa años en sus pensamientos y visiones del mundo, con una madre sumisa, que quiere y no puede (o no sabe) y una abuela encargada de moldear, digo de criar, a un Antonio que sea “tal como un hombre debe ser”.
Con tal de mantener un statu quo de la familia, más allá de si esto es sano y adecuado, da cuenta de que, en algunos casos, no se ha cambiado tanto a través de los tiempos, como se dice de la boca para afuera. El “más vale malo conocido que bueno por conocer”, nefasto refrán con el que se criado a generaciones enteras, se cerrará a cualquier hecho que implique modificación o incluso mejora de la situación.
El recién llegado, el extraño, el desconocido (que responde al nombre de Miguel) será quien plantee todo tipo de preguntas y siembre dudas sobre comportamientos y axiomas varios. Y es esa lucha donde, en un punto, tampoco interesa plantear alguna mejora porque, como dice el refrán, el hombre es un animal de costumbres. Y las va a mantener cueste lo que cueste, sea cual sea el medio, llamase educación de una hija, sometimiento de una esposa o miedo propio de enfrentar una nueva situación. Inclusive, podría describirse a la familia es como un Aparato Ideológico del Estado al decir de Althusser, como reproductor de la ideología dominante.
La puesta es correcta y cuenta con una buena escenografía al tiempo que con buenas actuaciones aunque quizás, la linealidad de las relaciones y algunos personajes quedan más cerca de cierta caricatura de otros tiempos, no tan próximos a los actuales. A pesar de esto, la puesta es disfrutable de principio a fín, con un final fuerte aunque no menos inesperado, que llama a la reflexión de manera simbólica a los miedos y prejuicios de los individuos
“Morir en familia” es una puesta correcta y amena que reflexiona sobre la familia en su doble rol de refugio y cárcel de los individuos.
muy buena obra. donde puedo acceder a este texto? muchas gracias.
Tratá de comunicarte con el director o alguien del elenco. Seguramente podrán ayudarte. Saludos!