Libro: “Símbolos de Buenos Aires –la construcción emblemática (1503-1943)-”


Titular un libro como “Símbolos de Buenos Aires” (Editorial Maipue) hace que la curiosidad intente desentrañar esa palabra tan interesante y esquiva de definir que es “símbolo”. Un símbolo es la representación de una idea, con rasgos asociados por una convención socialmente aceptada. Es un signo sin semejanza ni contigüidad asi como una intencionalidad para ser designado. Charles Peirce hizo referencia a esto en la relación entre signo y objeto en el cual, el símbolo es cuando el signo no tiene ninguna relación con el objeto sino que se da por un acuerdo social, como la imagen de Cristo, por ejemplo. Esta cuestión “simbólica” y “social” es la que nos permite abordar desde distintos campos el presente libro.
En tiempos del Bicentenario recién acontecido, viene bien un libro destinado a repensar la construcción identitaria de la capital de la República. De esta manera, se presenta “Símbolos de Buenos Aires –la construcción emblemática (1503-1943)”, un libro basado en la investigación realizada por Guillermo E. D’Arino Aringoli, editada por Editorial Maipue.
Como buen libro de investigación, el autor plantea las preguntas desde el mismo inicio y las irá develando a medida que se aprehendan las poco más de trescientas sesenta y un páginas. Pero ojo, a no asustarse con el número. El libro se lee solo una vez que se empieza a repasar cada línea del texto.
Esas preguntas a las hacíamos mención parten de la curiosidad “¿Cómo es el proceso por el cual un lugar alejado del mundo civilizado se convierte en una gran ciudad?”, y “¿se pueden comprender su edificios, avenidas, plazas, sin una referencia histórica específica?”.
Para resolver estos interrogantes, D’Arino Aringoli no se priva de realizar un exhaustivo y pormenorizado estudio de la evolución de Buenos Aires. Dividido en tres partes, “La polvora y el incienso”, “La escuadra y el compás” y “Las avenidas insomnes”, cada una de ellas tendrá sus propios capítulos. Cada uno de ellos se inicia con una ilustración y son ricos en datos históricos y arquitectónicos. Al respecto, el libro va más allá del enfoque arquitectónico propiamente dicho y le adosa los mencionados datos históricos que se van desarrollando en el período tomado para el estudio, con una prosa amena y de fácil lectura. La construcción de la identidad y el desarrollo político de la urbe no están al margen. Por el contrario, el entramado del libro permite que todos estos componentes fundamentales en la constitución de la capital del Estado se junten, conformando un libro que combina sabiamente el dato frío y la referencia geográfica fácilmente reconocible para el lector.
Esta división del libro permite que aquél que quiera investigar un período determinado, lo pueda hacer asi como aquél que quiera adentrarse en las aguas de la investigación sobre el origen y desarrollo de la Reina del Plata. Riquísimos son los capítulos “El Estado de Buenos Aires” y “El triunfo centrista” dentro de “La pólvora y el incienso” o “El Centenario” y “El progreso de la patria” en “La escuadra y el compás”.  La descripción de cada acontecimiento es magistral. Con dosis exacta de prosa narrativa para agilizar la lectura, el relato se hace atrapante en la lectura de los hechos narrados.
La cultura y la música no quedan afuera del libro. Es más, hay todo un capítulo dedicado al tango, bajo el título “El cambio en la opulencia”, y su relación con lo que sería la “alta alcurnia” de la Capital. Una ciudad sin cultura no es una ciudad y este aspecto está sabiamente estudiado.
El libro es una investigación seria, realizada a conciencia sobre el patrimonio cultural de la Ciudad y sus habitantes, en poco más de cuatrocientos cuarenta años. Un patrimonio que responde a razones ideológicas. Basta con dar un vistazo al axioma que rige a la ciudad, de ser la más “europea” en un continente nada europeo pero en la cual, tanto los pueblos originarios como los mestizos han sido exterminados o corridos de la escena, para no ser vistos. De esta manera, se aprecia el porqué se dice que “una ciudad es siempre un acto político”.
“Símbolos de Buenos Aires –la construcción emblemática (1503-1943)” es un excelente libro para aproximarnos con seriedad y entusiasmo al desarrollo y a la evolución de esa ciudad tan hermosa, furiosa y única como es Buenos Aires.

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