Hamlet X Hamlet (Teatro)

The only one

Concepción, dirección e interpretación: Marcelo Savignone. Vestuario: Lucila Fiorenza. Escenografía: Lina Boselli. Iluminación: Nacho Riveros. Audiovisuales: Belén Robaina. Operación técnica: Luciano Cohen, Federico Costa y Pedro Risi. Entrenamiento corporal: Juan Martín Fernández Ozán. Entrenamiento vocal: Claudio Garófalo y Josefina Lamarre. Asesoramiento literario: Juan Manuel Bernal, Eva Rodríguez. Asesoramiento musical: Nicolás Savignone. Producción ejecutiva: Maria Florencia Alvarez y Silvia Barona.
Teatro Belisario. Av Corrientes 1624. Viernes y Sábado, 21:30 hs.
Los clásicos siempre tienen una vuelta más de tuerca. Tal es el caso de “Hamlet”. En esta ocasión, el versátil Marcelo Savignone se carga al hijo “pródigo” de Shakespeare para hacer un unipersonal arriesgado, que busca correr la línea de lo usualmente visto.

Savignone retoma sus múltiples universos para incorporarlos al molde shakesperiano para crear una puesta intrigante y dinámica basada en la vida de un actor que está ensayando Hamlet. La metamorfosis y la simbiosis que empieza a surgir permite ver ambos personajes transitando una delgada línea entre realidad y locura. Como no podía ser de otra manera, las máscaras están presentes, dando vida a algunos personajes como Ofelia. 

Los disfraces y los dibujos son parte presente en un vestuario fundamental para la concepción de la obra asi como la escenografía. La música es otro punto fundamental, con temas de Beck, Cat Power o Veta Band que le brindan un clima especial a la puesta junto con la multimedia pero con buen gusto, sin caer en el videoclip teatral, tan visto en los últimos tiempos. Marcelo Savignone despliega su arsenal físico e interpretativo tal como nos tiene acostumbrados aunque, en este caso, agrega el canto, que lo realiza con justeza, sabiendo lo que puede y lo que no, sin buscar lo imposible.

Habrá quienes digan que la puesta no respeta los preceptos del original y los que defenderán la busqueda constante. Sin dudas, esta idea de Marcelo Savignone de encarnar a dos personajes en la misma obra, siendo uno de ellos Hamlet, pone de manifiesto que los caminos transitados no es lo suyo. A título personal, se aplaude este tipo de riesgos, lejos del “más de lo mismo” que viene sucediéndose en el teatro porteño.

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