Comienza la 16° Feria del Libro Antiguo

Desde hoy 29 de noviembre hasta el 3 de diciembre, se llevará a cabo la 16° Feria del Libro Antiguo de Buenos Aires, un acontecimiento bibliográfico plenamente instalado en el calendario cultural de la Ciudad y del país. ECDL trae toda la información y la palabra de Victor Aizenman, uno de los organizadores de la feria.

Una gran noticia para la cultura de la ciudad y del país es la nueva edición de la Feria del Libro Antiguo. Esta decimosexta edición se llevará a cabo en la Casa de la Cultura (ex Palacio de La Prensa), ubicada en Av. Rivadavia 564 CABA. La muestra reunirá a 20 expositores y será inaugurada con una mesa redonda con motivo de la celebración del centenario de “Fervor de Buenos Aires”, el primer poemario de Borges. Participarán de la misma Beatriz Sarlo, Daniel Balderston, Sylvia Saítta y Daniel Link.

Por otra parte, la feria es una ocasión especial para apreciar y adquirir materiales bibliográficos históricos, literarios, científicos y artísticos dentro de un vasto abanico temporal que va desde el siglo XVI hasta el siglo XX. Los libros, documentos y materiales que los anticuarios exponen tienen un enorme valor patrimonial. Habrá rarezas, manuscritos y primeras ediciones de la obra de Borges que tendrán una exposición dentro de la Feria.

Por otra parte, otra novedad a destacar es el taller que reunirá, dentro del espacio, a encuadernadores, grabadores, impresores, restauradores, ilustradores y calígrafos que exhibirán sus artes y oficios en interacción con el público. Además, este año habrá una destacada presencia de la Biblioteca Argentina para Ciegos, con sus piezas en sistema Braille, y la presentación del primer libro háptico de artista, que permite una experiencia diferente a través del tacto. Este ejemplar tendrá, justamente, una selección de poemas de “Fervor de Buenos Aires”.

Organizada por la Asociación de Libreros Anticuarios de Argentina (ALADA), la Feria es única en su género tanto en nuestro país como en América latina.

Victor Aizenman: “El revisionismo ha fortalecido la figura de Borges de manera definitiva”.

En diálogo con ECDL, Víctor Aizenman, uno de los organizadores de la Feria, detalla todos los pormenores de lo que es esta Feria del Libro Antiguo, la influencia de Borges, la definición de “libro antiguo” y la relación con los jóvenes, en tiempos de IA y frenesí de comunicación cibernética.

– Víctor, ¿cómo es organizar la 16° Feria del Libro antiguo?

– Es la ocasión muy esperada de reunir a los mejores profesionales del anticuariado del libro, en un espacio compartido donde poner a disposición del público las piezas más distinguidas de valor histórico, literario, artístico, científico y cartográfico, cuidadosamente atesoradas durante un año de búsquedas y descubrimientos.

– ¿Qué es un “libro antiguo”? ¿En qué se diferencia de un “usado”? ¿Hay libros antiguos “nuevos”?

– Según la definición burocráctica, un libro comienza a ser antiguo a partir de los 100 años de su publicación. Sin embargo, hay materiales más recientes que, por su significado cultural y la escasez o rareza de circulación, ingresan también en el campo de trabajo de los profesionales anticuarios. Un criterio que define lo “antiguo” es aquello que ha dejado de producirse, lo que ha perdido su “utilidad” o la función para la que fueron creados. Cuando algo ya no “sirve” es cuando se puede percibir toda su belleza y su significado histórico. Lo auténticamente antiguo perdura, lo viejo es efímero y desaparece.

– La inauguración va a estar a cargo de una mesa redonda de especialistas (¡un lujo!) en la obra de Jorge Luis Borges por el centenario de “Fervor de Buenos Aires”, su primer poemario. ¿Cómo fue la conformación de la misma?

– Hemos convocado a cuatro de los mayores especialistas en la obra de Borges. Beatriz Sarlo, Sylvia Saitta, Daniel Balderston y Daniel Link son autores de algunas de las lecturas más lúcidas, brillantes y profundas. Todas ellas son hitos insustituibles de la bibliografía consagrada al escritor.

-Hoy en día, en época de revisionismos varios, ¿cómo ve instalada la figura de Borges?

– El revisionismo, lejos de relativizar su figura, la ha fortalecido de manera definitiva. Aquellos que por razones ajenas a lo literario condenaron su figura hace unas décadas, han hecho su autocrítica. Hoy, su nombre está instalado en el centro de la literatura universal.

– ¿A Borges se lo cita más de lo que se lo lee?

– Esa es una estadística de la que carezco de datos. Tal vez a Borges no le disgustaría saber que su palabra se ha hecho anónima y que se ha incorporado a cierto imaginario popular. Finalmente, él siempre descreyó de la diferencia entre autor y lector.

– En esta edición, hay una destacada participación de la Biblioteca Argentina para Ciegos.

– La participación de la BAC tiene el sentido y el propósito de incorporar un acceso a la cultura letrada distinta del habitualmente consagrado. El sistema Braille permitió incluir a una población de otro modo marginada, a ese universo. Por su parte, la Feria pone en pie de igualdad ambos caminos de ingreso al mundo de la cultura y del arte, promoviendo la interacción entre videntes y no videntes. De hecho, ALADA encomendó para esta edición la creación del primer libro háptico de artista, que propone una experiencia táctil que puede ser compartida por ambos. El libro será donado a la Biblioteca Argentina para Ciegos.

– El libro antiguo, ¿tiene un público “especial”?

– El acento está puesto en el mundo del coleccionismo y la bibliofilia, pero el papel de la academia y la investigación es crucial. Sin embargo, un amplio público de docentes, lectores y apasionados por las expresiones históricas y estéticas de épocas pasadas también integran este universo.

– ¿A qué se refiere con un coleccionismo “responsable”?

– A aquél que es consciente de la importancia patrimonial de los materiales que atesora y de la necesidad de ponerlos al alcance público cuando las circunstancias lo exijan. Esto puede ser a través de exposiciones, publicaciones y cesiones para tareas de investigación y conservación. Además, se debe ser consciente de que el destino de los libros es la circulación. En tanto coleccionistas, somos huéspedes de “objetos” que están en tránsito hacia un destino impredecible.

– ¿Cómo es la conservación de este patrimonio de enorme valor cultural en medio de una cultura de lo efímero, lo actual y dominio de las redes sociales?

– El placer, la resistencia y la conciencia de que el libro está en la base misma de la civilización son las claves de la conservación. El libro no está atacado por las nuevas tecnologías. La invención de la imprenta reemplazó al manuscrito iluminado -que hoy es un objeto precioso de colección- y perdura como uno de los altos testimonios de la creatividad humana. El e-book, en cambio, no podrá desplazar la perfección del “aparato” libro.

– ¿Hay políticas estatales que ayuden al respecto?

– No. El Estado se acuerda mal y tarde de la importancia del testimonio histórico que el libro contiene y significa, y gran parte de sus acervos, museos y archivos no existirían sin la generosidad de los coleccionistas que los legaron.

– ¿Hay jóvenes dentro del coleccionismo?

– Sí, los hay.

– ¿Cómo ve la relación de las nuevas generaciones con el libro-papel?

– De interés, de uso, de aceptación de su existencia como un hecho, a veces natural, a veces dubitativa.

– ¿Cuándo surge su interés por el libro antiguo?

– Desde muy joven. El coleccionismo y la bibliofilia son un virus con el que se nace inoculado.

– ¿Recuerda cuál fue el primer libro que tuvo en sus manos y lo impactó?

– Las obras de Apuleyo, publicadas en 1467 por la primer imprenta establecida en la ciudad de Roma, a cargo de dos discípulos de Gutenberg.

– ¿Hay algún libro que esté buscando y todavía no haya encontrado?

– Los “Himnos rojos”, de Jorge Luis Borges…

– Le entregan un formulario que le pregunta por su profesión, ¿qué pone?

– Víctor Aizenman, librero anticuario.

– Si por la puerta de su casa, entrase el Victor de 16 años, ¿qué le diría? ¿Algún consejo o recomendación?

– Que no abandone nunca el estremecimiento que sentía a esa edad ante la visión o el contacto con libros del siglo XVI, XVII, XVIII…. Que nunca caiga en la naturalización de ese contacto, aunque muchos años de profesión le hayan dado una falsa sensación de familiaridad con lo que en verdad es excepcional.

Feria del Libro Antiguo. Casa De La Cultura  Av. Rivadavia 564 CABA

+Miércoles 29/11 de 18 a 22 h.

+Jueves 30/11, viernes 1/12 y sábado 2/12 de 14 a 20 h.

+Domingo 3/12 de 14 a 18 h.

Redes de ALADA

IG: @aladalibros

FB: librerosanticuariosdeargentina

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