La coqueta Sala Siranush tiene esa versatilidad mágica que la hace pasar de estado a otro, sin que afecte en nada, su esencia. Un jueves, albergará a Daniel Melero, tal como hemos contado con anterioridad y al día siguiente, será el turno de Sergio Pangaro y Baccarat. En este caso, los sillones de los costados dejan su lugar para grandes mesas redondas, donde los comensales desgustarán las delicias de la casa al tiempo que la buena música se apodere del lugar. En el centro, un espacio vacío recuerda a las pistas de baile de otros tiempos.
Para esta ocasión, Sergio Pangaro y Baccarat realizarán un viaje a través del tiempo en busca del ritmo perfecto.
El humor y la prestancia de una banda que suena afinada, brindaran el marco exacto para que es viaje a través de varias décadas sea disfrutable de principio a fin.
El espectáculo será inclusivo ya que contendrá guiños al melómano como a aquél que va a pasar un excelente momento. Podrá sonar “Oye como va” al cual se le añade “El día que me quieras” al mismo ritmo. O el clásico “Just a gigoló” el cual muchos conocerán de versiones tan disimiles como las de Louis Prima, Bing Crosby o David Lee Roth. Canciones que van desde el dixieland hasta el foxtrot (tal el caso de “Bei mir bistu schein” traducida al castellano) harán las delicias de una primera parte de un viaje que abarcará los años 20.
El tiempo hará que la música se detenga en el escenario pero que habilitará la pista de baile la cual se poblará al instante, apenas suenen el famoso “One, two, three, fooour” de Paul Mc Cartney, y los Beatles sonando tan brillantes como siempre con “I saw her standing there”. De esta manera, la gente danzará con James Brown, Madonna, Luis Miguel antes de que Sandro entone el clásico “Rosa” y la música de dibujos animados anuncie que la velada continúa pero desde las mesas.
Desfilarán los 50’, con “Dolce vita” o el clásico “All of me”. La banda, compuesta por Leonardo Minig en guitarra, Roman Tardella en bajo, Fernando Carlini en saxo, Gabriel Muscio en batería, Mariano Gianni en piano, Christian Terán en trompeta y clarinete, Ciro Plateroti en percusión y Adriana Vazquez y Agustina Simonian en coros, tiene sus momentos de lucimiento en los que acompañan a Pangaro en el desarrollo del viaje. Aquí, la parada musical en la pista tendrá un ritmo más homogéneo con Madonna, Eurythmics, Technotronic o Locomia.
La recta final del show serán los años 90 y tendrá participaciones de Fabio Alberti y Zambayonny en videos alusivos a una época bastante particular, cuyas huellas se sufren al día de hoy. Pangaro contará una historia sobre Paul Mc Cartney que se perdió el show de Baccarat a través de una canción que contendrá el riff de “Hey bulldog” para luego seguir con “Torero” y un divertido mix de paso doble con chachachá. El rock se volverá hacer presente con “Hound dog”. El final será con la conclusión de donde se encuentra el ritmo perfecto y los clásicos “Boogaloo” y “Lluvia dorada”.
El show llega a su punto final. Cae el telón para un espectáculo entretenido, de gran calidad interpretativa en el que Sergio Pangaro y Baccarat muestran que son un estilo en si mismo.
Vuelven a sonar los Beatles y su “Rock and roll music”. Algunos vuelven a la pista, otros –mayoría- parten raudos, como Cenicientas ante el inminente llegada de las doce. Pero esto, será análisis de otra crónica.
De momento queda un espectáculo excelente para disfrutar más de una vez. Todo gracias al genio creativo de Sergio Pangaro.
De momento queda un espectáculo excelente para disfrutar más de una vez. Todo gracias al genio creativo de Sergio Pangaro.
Sergio Pangaro y Baccarat. Sala Siranush. Armenia 1353. Viernes a las 21hs