En Buenos Aires pasan cosas. A veces uno se entera por circunstancias relacionadas a su actividad o simplemente porque la casualidad metió la cola. De esta manera y con esta impronta, se relatarán historias y hechos varios dignos de mención.
Fotos: Prensa CTBA
Se realizó la presentación de la programación de Complejo Teatral de Buenos Aires para la temporada 2025. Como suele ocurrir, se llevó a cabo en el Teatro San Martín. Gran cantidad de artistas, periodistas y allegados colmaron el hall central Alfredo Alcón del mítico teatro de la calle Corrientes. Se los veía por allí a Joaquín Furriel, Eleonora Wexler, Gabriel Goity, Paola Krum, Muriel Santa Ana, Jorge Suarez, Ana María Cores, Luciano Castro, Arturo Puig, Martín Seefeld, Los Macocos, Pablo Mariuzzi, Mariano Torre, Flor Otero, Patricio Abadi, Emiliano Dionisi, Marcelo Savignone, Martín Urbaneja, Milagros Almeida y Mariana Genesio, entre otros. Un clima de armonía y amistad inundaba el recinto, mientras se sacaban fotos y los saludos iban y venían. De a poco, se fueron desplazando hacia la sala Casacuberta donde se realizaría la presentación propiamente dicha.
Pantalla grande junto con dos sillones para aquellos que lleven adelante la ceremonia. Mucha gente se ve en la platea, esperando el inicio de la ceremonia. Inclusive, hay caras “mediáticas” que no suelen ser habitués del teatro a menos que haya alguna “figurita famosa”. Ni hablar de los cholulos de siempre. Había más cámaras que de costumbre para esta presentación. El motivo se clarificó enseguida con el ingreso del jefe de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, Jorge Macri al escenario.
El director del CTBA, Alberto Ligaluppi recibió al mandamás porteño y a la ministra de Cultura de la Ciudad, Gabriela Ricardes en un paso de comedia respecto quienes se quedaban en el escenario por los sillones a disposición. Es Ligaluppi quien destaca la presencia de Macri en el recinto en tanto es “el primer jefe de Gobierno en asistir a una presentación de programación del Teatro San Martín en 60 años”, ante la sorpresa del mencionado y del público presente. La misma se debe a que el dato era equivocado. Horacio Rodriguez Larreta estuvo presente en la presentación de la Temporada 2020 del Complejo Teatral de Buenos Aires. Inclusive, fue parte de la reapertura del Centro Cultural Recoleta en 2019 . De hecho, en ambos eventos estuvimos invitados y lo reflejamos tal como lo pueden apreciar en estos links.
Ricardes subrayó la presencia de “los hacedores y los artistas” destacando que “la diversidad, su variedad y su calidad, ponen a la ciudad de Buenos Aires entre una de las capitales teatrales del mundo sin duda”. La ministra fue precisa con sus aseveraciones. “Estamos acá para revalorizar y para volver a centrar nuestra misión. ¿Cuál es la misión del teatro público, para nosotros? Poner al ciudadano en el centro de la escena, al pensarlo como espectador y como público”. Dio cuenta del deseo de “producir contenidos de excelencia, de relevancia, de calidad. Experiencias transformadoras que puedan llegar a la mayor cantidad de público posible”.
El discurso de Ricardes era claro en tanto el linkeo con la coyuntura actual. “Comprendemos perfectamente lo que significan las industrias culturales y creativas en la generación de empleo de calidad y también en los recursos que esto reporta a la ciudad de Buenos Aires”.
El clima era distendido. Es más, cuando Ricardes mencionaba el éxito de la gira de “La gran ilusión” por España y de “Cyrano” por la costa argentina y recordaba como “Las cautivas” habían llegado al Metropolitan –todas estrenadas en el TGSM-, algunos elencos gritaron el nombre de sus trabajos. Se escucharon “Las mujeres de Lorca”, “Cae la noche tropical” y “La vis cómica”, entre otras. En este marco, recalcó que, “el año pasado, sin contar todas estas nuevas directrices y nuevos espectadores que se generan en otros lados, tuvimos 572.638 espectadores”. Dejó para el final la parte más fuerte de su intervención, al valorizar el trabajo realizado en tanto “tener la valentía de ir un poco a contracorriente del momento entendiendo la importancia y la valoración de lo que significan los espacios públicos para la generación identitaria”.
El jefe de gobierno porteño también tenía bastante que decir. Adoptó un modo descontracturado para sus palabras ya que iba a hablar “desde el sentimiento”. “Estoy profundamente emocionado y orgulloso de lo que venimos haciendo en cultura”. Acentuó “lo relevante que es invertir en cultura” y que “no es un gasto”, potenciando sus virtudes al sostener que “es una inversión que transforma vidas, que rescata personas, que nos hace diferentes”.
Por su parte, Alberto Ligaluppi se dedicó exclusivamente a presentar la programación del Complejo Teatral de Buenos Aires con lujo de detalle.
Entre los grandes estrenos para la Temporada 2025, se destacan tres clásicos: “Ricardo III”, de William Shakespeare, protagonizado por Joaquín Furriel, Alejandra Flechner, Luis Ziembrowski, Ingrid Pelicori, Belén Blanco, Marcos Montes, Luciano Suardi, María Figueras e Iván Moschner y dirigido por el director catalán Calixto Bieito. Habrá una nueva versión de “La gaviota”, clásico de Antón Chéjov, con Muriel Santa Ana, Marcelo Subiotto, María Inés Sancerni, Mauricio Minetti y Pablo Caramelo. La dirección será de Rubén Szuchmacher. Finalmente, “Los pilares de la sociedad”, de Henrik Ibsen, con Eleonora Wexler y Martín Seefeld y el debut en la dirección de Jorge Suarez.
En lo que a autores nacionales se refiere Mauricio Kartún presentará “Baco Polaco”, su última creación, con Aníbal Gulluni, Soledad Bautista, José Mehrez, Paloma Zaremba, Nahuel Monasterio y Luciana Dulitzky. En cambio, Gonzalo Demaría estrena “Sansón de las islas” con Luciano Castro. Cuenta la historia de un luchador de catch retirado en el contexto de la Guerra de Malvinas. La dirección será de Emiliano Dionisi y el elenco incluye a Manuel Vicente, Vanesa Maja y Gonzalo Gravano. Por su parte, Marcelo Mininno concibió “Ateneo para una familia”, con Agustín Rittano, Malena Figó y Karina Antonelli.
Otro de los estrenos anunciados es “El suelo que sostiene a Hande”, basada en la vida de la activista trans Hande Kader. Contará con la dirección de Corina Fiorillo y un elenco que incluye a Payuca, Mario Alarcón, Paula Mbarak, Diego Gentile, Marcelo Savignone, Inda Lavalle y Gustavo Pardi. En cambio, “La piedra oscura” del español Alberto Conejero, será dirigida por Alejandro Giles con actuaciones de Martin Urbaneja, Iván Hochman y Milagros Almeida. Finalmente, “Una niña sobre un altar”, de Marina Carr –traducción de Cecilia Chiarandin- y dirección de Oscar Barney Finn. Paulo Brunetti, Carlos Kaspar y Pablo Mariuzzi serán parte de esta puesta. Agostina Luz López y Martín Flores Cárdenas presentarán sus nuevos proyectos, “Un punto oscuro” y “Al oeste. Capítulos I y II”, respectivamente.
A nivel internacional, se producirá el estreno de “La calórica”, de España, con dramaturgia de Joan Yago, dirección de Israel Solà y un elenco integrado por Xavi Francés, Aitor Galisteo-Rocher, Esther López y Marc Rius / Pep Ambròs
En el Ciclo “Monólogos”, se destacan “Eros”, con Mariano Torre y dirección de Ezequiel Sagasti; y “El deseo”, de Patricio Abadi, con Paola Krum y dirección de Javier Daulte. Además, se va a realizar un homenaje a los Macocos por sus 40 años de trayectoria. Al respecto, Daniel Casablanca vuelve con “Amadeo”, inspirada en “La flauta mágica”.
Si hablamos de reestrenos, se producirá la vuelta de “Cyrano”, “James Brown usaba ruleros”, “Las mujeres de Lorca” y “El trágico reinado de Eduardo II. La triste muerte de su amado Gaveston, las intrigas de la reina Isabel y el ascenso y caída del arrogante Mortimer”
El Ballet Contemporáneo del Teatro San Martín también tendrá estrenos, como “Rovireando”, una coreografía de Lisi Estaras en homenaje al gran bandoneonista y compositor Eduardo Rovira y un reconocimiento a Ana María Stekelman, figura icónica en la danza contemporánea argentina. Ambos, con dirección de Andrea Chinetti y codirección de Diego Poblete.
En cuanto al Grupo de Titiriteros del Teatro San Martín, se presentará una adaptación de cuento de Ray Bradbury (“Todo el verano en un día”) asi como los proyectos dirigidos por Ana Alvarado (“El vestido”, de María Teresa Andruetto), Analía Fedra García (“Alejandra y los mundos”, de María Granata) y Adelaida Mangani, con “Bimba”, su biografía escénica.
Finalmente, la enorme María Elena Walsh tendrá su homenaje con “Cuentopos de Gulubú”, con dirección de Chacho Garabal.
Una nueva temporada comienza en el Complejo Teatral de Buenos Aires. Como siempre, con los mejores deseos en pos de la cultura de una ciudad que no para de crear, por más que la coyuntura no sea le sea propicia. Más aún en tiempos en que priman los deseos endogámicos e individualistas de quienes conciben todo como un número, sin humanidad alguna. Muy lejos de ser “gente de bien”.
Una reflexión final.
La presencia del jefe de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires sorprendió a varios aunque después, se clarificó bastante el panorama. Las palabras de la ministra Ricardes mantuvieron el tono sereno pero claro en sus intenciones. Las alusiones eran más que obvias. A buen entendedor, pocas palabras aunque siempre queda un dejo de duda respecto a las posiciones sostenidas previamente al arribo de la podadora desquiciada.
Por su parte, el desmarque que realizó Jorge Macri con la política cultural (¿?) del gobierno nacional fue más que notorio. El aplauso inmediato se caía de maduro. No obstante, no dejó de sorprender el tono de su alocución, que parecía más cercana a Myriam Bregman más que al PRO. Uno tiene memoria de la gestión realizada por los gobiernos de Mauricio Macri y Horacio Rodríguez Larreta -pandemia de por medio-, en lo que a cultura se refiere. Se la enalteció pero no se la ayudó como se dice. Si bien el sillón de Rivadavia está ocupado por un individuo que busca destrozarla de cualquier forma, esto no invalida lo ocurrido en años anteriores en CABA.
¡Ah! Una pena el error de aseverar que Jorge Macri es el primer jefe de Gobierno fue a la presentación de la programación del Complejo Teatral de Buenos Aires. Más aún cuando fue la propia oficina del GCBA lo reflejó en su momento. Sería lamentable que, en pos de la interna del PRO y la eventual alianza (o no) con La Libertad Atrasa, se borre lo realizado por Horacio Rodriguez Larreta, que lejos estuvo de ser una maravilla. Reiteramos: tenemos memoria. Somos periodistas que investigamos, preguntamos y difundimos. Para obsecuentes, están los de la primera y segunda fila que sacan fotos y sonríen todo el tiempo en pos de una acreditación, con poco menos que nada en su capital intelectual. «Fans que cuentan lo que ven». En tiempos de posverdad y capacidad nula para el debate, no extraña en absoluto que esto ocurra.
Parece que, ante el avance de la motosierra desquiciada, algunos se dieron cuenta –tarde- que confiaron en su propio verdugo. El remedio era peor que la enfermedad. El complejo de «conciencia limpia» -y el odio- de muchos/as/es les impidió ver -je- lo que venía. Hoy por hoy, solo esperamos que la cultura tenga realmente una inversión seria para su desarrollo al igual que la educación y la salud, pilares de una sociedad.