Cantante y actriz, cumple veinte años de trayectoria y decide tirar el Maipo Kabaret por la ventana para celebrarlo. Cecilia Milone abre su mundo y su corazón para dar rienda suelta a un aniversario que la encuentra en plena madurez artística.
– Cecilia, ¿cómo surge la chance de hacer Valiente y Sentimental?– Mirá, es un espectáculo que surge de mi necesidad de celebrar mis veinte años de profesión. Quería celebrar y bendecir mi vocación asi como agradecer al público por todo el amor de estos veinte años. No quería caer en esto de hacer un repaso de los temas que hiciste a lo largo de tu carrera sino que quería renovarme. No se si reinventarme pero si un renacimiento profesional. O sea que no fui a buscar donde había nacido todo hace veinte años sino que fui a buscar donde había nacido directamente mi vocación. Entonces empecé a buscar cuales fueron los textos y canciones que me habían conmovido. Donde había nacido el juego. Me di cuenta que tenía que ver con mi abuela madrileña, con mi tia tocando las castañuelas y las fiestas de la infancia, con mi guitarra sacando canciones. Me di cuenta que ese género de esas canciones clásicas españolas tenían mucho que ver conmigo. También tenían que ver con el tango porque tienen mucha poesía y una fuerte línea melódica lo cual se nota a través del tiempo. Es más, lo digo en el espectáculo que cada vez más cantantes flamencos pasan tangos, lo cual es cada vez más habitual. Además, los argentinos siempre tuvimos un amor muy especial por recibir textos, músicas y películas españolas. Mi mamá, en vez de leerme cuentos, me leía obras de Alejandro Casona de chica. Asi que ahí nació mi amor por la dramaturgia, desde mi infancia. Entonces hice un coctel y, tratando de imprimirle mi personalidad para que el público no sintiese un volantazo tan drástico, traté de llevarlo a ritmos que he transitado como el bolero, el tango o ritmos tropicales y al mismo tiempo, abordar textos de mucho peso dramático. Esto, mechado con el estilo que ya tengo en mis espectáculos, que son monólogos de humor, con mucha interacción con el público. Todo esto para aliviar y balancear todo ese peso dramático. La sensación que tengo es que este espectáculo sea una fiesta cada noche. ¿Viste cuando vas a una fiesta de quince o un casamiento, que la fiesta pasa por extremos de emoción? Que te pasan el video y todos lloran, que después la nena canta su canción y viene el carnaval carioca con todos excitados y bailando…Quería lograr eso pero ser yo la que pasara por todos esos estados juntos, con el público. Pasearlos y llevarlos por esos estados. Ser la animadora. Una vez me dijo Ricky Pashkus que tengo vocación de animadora. “Todo el tiempo estás animando”. Nunca lo había pensado de esa manera. Animar viene de “ánima”, de alma. Es verdad! Tengo un enorme deseo de que las almas la pasen realmente bien.
– Sabés que son pocos lo que tienen esa posibilidad…
– Si, es un don. Ni siquiera alardeo de eso, más allá que de eso pude haber hecho un oficio, porque soy disciplinada y haya estudiado, es lo que mejor me sale. Pero la verdad, te confieso, esto lo hago desde chica. Repito mucho una frase que me conmovió, de Francisco Benavente que es “El único egoísmo aceptable es el de procurar que todos estén bien para estar uno mejor”. ¡Es genial! Es un poco lo que me pasa. Me encanta pasarla bien. ¡Tengo vocación para eso! Llega alguien a casa y le ofrezco algo al toque, tal como te dije a vos, cuando entraste al camarín. Me parece que es más agradable. El mundo es demasiado hostil…
– Para que hacerlo más hostil, ¿no?
– Claro! Incluso me suele pasar que mucha gente me pregunte si soy provinciana o no soy de Capital por esta característica. Me ven con esa cosa de trato más campechano, de pueblo y a mi me gusta sentir que vivo en un pueblo. A muchos artistas les pesa el tema de la popularidad pero no es mi caso. Al contrario, me hace sentir como que vivo en un pueblo enorme, como que te conocen todos. Me hace sentir acompañada y querida a través del intercambio de afecto. No me pesa que la popularidad, que la gente me salude y me siga.
– ¿No te atosigó la popularidad?
– No, al contrario. Me hace muy feliz. Siento que puedo expresar aún más lo que mi corazón eligió. Tengo vocación de artista todo el tiempo y no de a ratos. Soy muy respetuosa con aquél que siente que el trabajo es el trabajo y cuando son actores, son actores y luego eso no tiene nada que ver en su vida personal. Es una elección y me parece muy bien que asi sea pero no es la mía. Yo quiero ser artista todo el tiempo. Si estoy en una reunión y puedo alegrar, cantar o recitar algo para emocionar, lo hago. Tiene que ver con mis entrañas. Además, tengo la bendición que esto me da de comer y que es mi profesión. La verdad, a mi me encanta.
Intermedio: El Maipo Kabaret nos recibe un jueves por la tarde. Esperamos un rato porque Cecilia está con unos colegas haciendo una nota. Se abre la puerta de su camarín y sale Ani, su perrita de cinco años. Jugamos con ella y entramos a hablar con Cecilia. “Te molesta si me voy maquillando para ganar tiempo?” pregunta. Asi es ella. Directa, frontal, con buena onda. Habla y dice lo que piensa, sin “cassette” con lo cual, la nota es un viaje directo al Milone’s World.
– ¿Te costó elegir el repertorio para el espectáculo o ya lo tenías más o menos elegido?
– No me costó demasiado porque lo fui eligiendo a lo largo de toda mi vida. Hay algunas canciones que tienen que ver con mi vida entera y otras que empezaron a aparecer de a poco. Hace dos años…seguramente tendrá que ver con el haber cumplido cuarenta años, hice como quien acomoda la casa. Pinté la casa de hecho y cambié algunas cosas. Cambié y acomodé varias cosas personales y profesionales. Investigué y me di cuenta por donde iba yo como persona y como artista. La verdad es que, a partir de ahí, empecé a ir para atrás y mirar eso en mi vocación sin saber que me iba a servir cuando yo tuviera la decisión para crear esta fiesta que este espectáculo. Creo que eso me pasó. Estos últimos dos años fueron enormemente intensos. Leí mucho lo ya escuchado y leí mucho lo ya leído. A partir de eso, salió lo escrito que tenía en el alma pero que no tenia escrito en el papel aunque ya estaba ya escrito. El espectáculo lo abro con una poesía que escribí, que se llama “Valiente”. La escribí en cuarenta y dos años si bien bajó en unos dias. Tuvo que ver con cosas que me fueron pasando en mi vida entera.
– Charlando con amigos periodistas, quizás hubo una sorpresa con el repertorio y esperaban un poco más de tango.
– Mira vos. La sorpresa que recibo es que por ejemplo, recitara –cosa que nunca había hecho- o que hubiese justamente, menos tango. Hay alguna cosa pero no mucho. Hasta ahora, las devoluciones fueron a favor. Nos sorprendió pero no extrañamos al tango.
– ¿Vas a hacer el disco?
– Si. Estamos terminando de arreglar algunas cositas referidas a los arreglos de las canciones. Entran ahora violines y violas y calculo que en diez o quince días, pondría la voz.
– ¿El disco sería como la parte final de todo este proceso, de este momento?
– No se si la parte final. Creo que no. Podría ser el comienzo de una nueva etapa. Es como tener la posibilidad de presentarlo oficialmente, hacer gira y preparar material a partir de eso.
– ¿Televisión?
– Mirá, cada vez me fui más acomodando en el lugar que me hace más feliz, que tiene que ver con el teatro y es el lugar donde quise estar siempre de chica. Esto de que, mi mamá me leyera más teatro que cuentos…este amor mio por el escenario desde chica siempre me hizo tener en claro que era el lugar al que sentía como mi habitat. Esto no quiere decir que, de pronto, me sienta atraída por un programa de tele que me ofrezca un personaje que esté bueno o algo de cine que me atraiga. Igual siempre estoy esperando y generando el proyecto pero para teatro. Esa es la verdad.
– Barbra Streisand solía definirse como “la actriz que canta”. ¿Tomás esa frase para vos?
– Si, creo que tiene que ver conmigo. También hay mucha técnica, tanto en su caso como en el mío. A veces, mi maestra de canto (que lo es desde mis dieciocho años) me reta. “Vos sos cantante. Tenés técnica lírica, estudiaste todos los días como una loca ¿Como eso de actriz que canta?”. Creo entender lo que dice Barbra Streisand y si, es cierto que uno hace una diferencia fuerte cuando uno hace una interpretación más allá de la melodía que está cantando.
– Hace un tiempo, un amigo tuyo, Juan Darthes vivió un episodio polémico con Marcelo Polino. Vos como lo viste?
– No lo vi entero. Solo la parte final con la explosión de Juan de enojo. Me hubiera gustado verlo entero. Si, se lo ve enojado a Juan. Es difícil opinar porque, precisamente, nunca he querido participar de ese tipo de programas. Me han convocado muchas veces -les agradezco mucho porque es su trabajo- y me honra que me llamen pero me sería difícil concursar con algo que es mi profesión y mi oficio. Eso por un lado y por el otro, si estas ahí, tenés que entrar en el juego y divertirte. Evidentemente Juan no pudo divertirse.
– Si por esta puerta, entrase la pequeña Cecilia que empezaba a tomar sus primeras clases de canto, ¿qué le dirías?
– (Piensa). Uh…no se. Es difícil porque es demasiado conmovedora pensar en una imagen asi. Eh…me parece que es como exactamente lo que soñó. No se si habría que decirle algo. Si entrase esa Cecilia de los siete años y se viera, quizás le agarraría un ataque de llanto, jajajjajjajaja. Creo que le diría “esperá tu milagro, te falta un rato”.
– ¿Como son los cinco minutos después de bajar del escenario?
– Los cinco…y los treinta! Jajajjjjajajaja. Son de enorme placer para mi como para Rubén Calegari y Guido Belsito, los músicos que me acompañan. Las veces que nos vamos a comer juntos o que después nos hablamos por teléfono, es un espectáculo que produce emociones tan extremas que nos vamos muy conmocionados. Nos cuesta bajar de un estado del cual tampoco queremos bajar porque es como un estado de gracia. Ya de por si, cuando uno termina de hacer teatro, siempre queda en un lugar de elevación espiritual. Y este espectáculo te deja por las nubes. Te da como vértigo mirar para abajo. Tenés que bajar de a poquito, por las dudas.
“Valiente y sentimental”. Teatro Maipo Cabaret. Esmeralda 443. Miércoles a sábado, 21 hs y domingos, 20.30 hs.
Un enorme placer leer las palabras de una ARTISTA increible. ¡¡FELICITACIONES!!